María Tabares #VocesVioletas

#VocesVioletas es un espacio semanal dedicado a compartir poesía escrita por mujeres de México y Latinoamérica.

María Tabares (Bogotá, Colombia, 1958) Poeta, narradora y editora. Egresada de la Escuela de Escritores de México, SOGEM. Su obra ha sido publicada en revistas y antologías de Colombia, Ecuador, Brasil, Argentina, México y Francia. Ha publicado los libros “Las Poetas del Megáfono”, “Y cae y suena y nos invade”,  “La luz, poemas de sombra”, Primer Premio Ediciones Embalaje, Colombia, 2011, “La tortuga feliz” (libro de artista); “Álulas” y  “Sinfonía, De mi sangre nacerán pájaros”,

Mención de Honor, Premio Nacional de Poesía Ciudad de Bogotá, por su libro “Los Sombra” en 2013. Tercer lugar en el Concurso Nacional de Cuento, Fundación La Cueva en 2012 por su  cuento Cinco minutos. Es co-editora del Fanzine La trenza, sobre poesía y ensayo escritos por mujeres en Colombia.

A continuación presentamos una breve selección de su obra poética:


 

Inspiración

La poesía no irá

ni más lejos ni más hondo

_____

_____

que yo misma.

Atrapada

dentro de esta jaula

al diario mirar que son mis ojos

al diario pensar que ocupa

todas las horas de mis días

atrapada

a estos dedos solo superficie

sin vislumbrar el fondo

ni al pez ciego


luminoso entre lo oscuro.

Pobre poesía mía

pobre


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sobreviviente parásita

asida a mis costillas

sin poder plantarse

tierra adentro

colgarse del sol

o del ala de un pájaro.

Amarrada en esta piel

a esta carne

a estos huesos.


 

¿A dónde van los pájaros muertos?

¿A dónde, los que no mueren por el atropello de un coche

o en el campo por la bala de un niño o de un hombre?

¿A dónde van cuando fallecen de enfermos o de viejos?

¿Por qué no caen como frutos de los árboles?

¿Como piedras?

¿Por qué no se ven sus cadáveres por los suelos de los bosques,

las calles, las aceras, el césped de todos los jardines?

Quién los entierra, antes que puedan los niños

y los poetas verlos deshacerse a la intemperie,

callados, quietos.

 


 

*

Y si te perdiera

como antes de tenerte

y al amanecer tu cuerpo

ido

no volviera a navegar mis ojos

y tus manos escondieran sus árboles

y su bosque con su brisa y sus diez pájaros

y margarita

flor de madera

me mirara de repente como extraña

o no me mirara más.

Si la puerta nuestra

(y es casa y no es cerca)

se cerrara

tú adentro

yo afuera

yo afuera

yo afuera.


*

 

Asesinada la otra vida

ahora es menos que humo

es no materia

es nada.

 

Lloraron sangre los muebles,

los ojos no los vieron pero también lloraron

la pérdida de los animales

los amaneceres

los lagos

los caminos.

(No hubo más remedio que ser uno, uno mismo, y ser verdugo).

Asesinada,

la cama

la cocina

el jardín

asesinado él

(cuerpo ligero de nube cuando baja aquí a la tierra)

hoy habitan otra dimensión.

No es de humanos penetrar en ese tiempo

del pasado

no es de humanos caminar despiertos en el espacio

de los sueños

asesinada la otra vida

ahora es menos que humo

es no materia

es nada.

 

 

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