Drones en la frontera: la nueva táctica de los “polleros” para el cruce de migrantes

Los traficantes de personas han encontrado en la tecnología un nuevo aliado para guiar a los migrantes en su intento de cruzar la frontera entre México y Estados Unidos. Ahora, los llamados polleros han sumado drones a su repertorio de estrategias, brindando indicaciones en tiempo real para esquivar la vigilancia de las autoridades en el cruce entre Tijuana y San Diego.
Un video que circula en redes sociales revela la operación a distancia de estos grupos. En la grabación, se escucha la voz de un presunto traficante dando instrucciones a un migrante que ya ha cruzado la frontera y se encuentra corriendo por el estacionamiento de Plaza Las Américas, en San Diego. La escena es clara: la indicación es deshacerse de cualquier prenda llamativa, moverse con naturalidad y alejarse lo más rápido posible del punto de cruce. “¡Quítate la camisa en la plaza! ¡Córrele! Va una camioneta atrás”, se escucha en la voz distorsionada del guía remoto.
El uso de drones no solo permite a los traficantes monitorear el cruce de los migrantes, sino que también les proporciona una ventaja táctica al reducir su exposición a las fuerzas de seguridad. Anteriormente, estas operaciones requerían presencia física y contacto directo con los migrantes. Ahora, la tecnología permite que los polleros coordinen los movimientos a distancia, minimizando riesgos y maximizando el éxito de los cruces.
El contexto geográfico juega un papel clave en esta operación. Plaza Las Américas, un concurrido centro comercial de San Diego, se encuentra estratégicamente ubicado junto a la frontera, convirtiéndose en un punto de dispersión ideal. La zona es transitada a diario por miles de personas, lo que facilita la integración de los migrantes sin levantar sospechas. Sin embargo, también es un área de alta vigilancia, lo que explica el uso de tecnología para mejorar la logística del cruce.
A pesar de la sofisticación de esta táctica, el método sigue siendo peligroso y precario para los migrantes. Si bien los drones pueden proporcionar información útil sobre rutas y presencia policial, los inmigrantes aún deben enfrentar el reto de llegar a un destino seguro por sus propios medios. Una vez dentro de Estados Unidos, el contacto con los traficantes se vuelve esporádico, y los migrantes quedan a su suerte.
Las autoridades de Baja California no han emitido un pronunciamiento oficial sobre esta modalidad operativa, aunque su implementación deja en evidencia la constante evolución de las estrategias de tráfico de personas en la frontera norte. En un escenario donde la vigilancia fronteriza se refuerza constantemente, los traficantes de migrantes buscan innovar con herramientas tecnológicas que les permitan seguir lucrando con la esperanza de quienes buscan una nueva vida al otro lado del muro.