La de 2024 en México será la elección más millennial de la historia

El término “millennial” se utiliza para referirse a aquellos nacidos entre 1981 y 2000, aunque no hay un consenso científico sobre el rango de edad de manera más específica. Este segmento de la población a menudo es objeto de chiste y escarnio entre la generación X (nacidos entre 1965 y 1980), las críticas incluyen aspectos como su adicción al teléfono móvil, al selfie, su individualismo, su exhibicionismo en redes sociales y su modo de trabajar, que incluye home office y consolas para jugar en la oficina. Además se les atribuye falta de iniciativa o de conocimientos básicos y de cultura general para la resolución de conflictos cotidianos, como trabajos domésticos, fontanería o reparación eléctricas sencillas, y a veces se les etiqueta como una “generación de cristal”. Estos clichés se difunden en memes, chistes y cuentas de redes sociales. Quienes solemos consumir en exceso TikTok y formamos parte de esa generación los vemos con mucha frecuencia. 

Esa generación hoy tiene el poder de la elección 2024, estamos frente a la elección más millenial de la historia de México

Fuente: Datos del Instituto Nacional Electoral

En 2012, los millennials constituían 18% del electorado, se proyecta que para 2024 esta cifra incrementará significativamente, representando más de 41% del electorado. Es decir, pasará de ser una quinta parte a convertirse en la generación más determinante de la elección, abarcando casi la mitad del electorado.

Sumado a la generación Z, los millennials son determinantes para la elección 2024 y podrían representar hasta 56% del electorado.

Fuente: Datos del Instituto Nacional Electoral.

¿Cuáles son los estados con más y menos millennials?

De cara a las elecciones de 2024, Quintana Roo encabeza la lista como la entidad federativa con la mayor concentración de población perteneciente a las generaciones millennial y Z, superando en nueve puntos porcentuales el promedio nacional. Este fenómeno puede explicarse en gran medida por la marcada orientación turística de ciudades emblemáticas como Tulum y Cancún.

Contrastando esta tendencia, Chihuahua se posiciona como el estado con la menor representación de la generación millennial, registrando una cifra ocho puntos por debajo del promedio nacional. 

Por otra parte, destaca la Ciudad de México se destaca por ser la entidad con la menor presencia de la generación Z en todo el país. En contraste, Chihuahua lidera en la concentración entre los baby boomers, señalando una dinámica demográfica única en esa región. Estos datos subrayan la diversidad demográfica a lo largo del territorio mexicano, revelando patrones significativos que pueden influir en el panorama electoral.

Fuente: Datos del Instituto Nacional Electoral.

¿Qué significa estar frente a la elección más millenial de la historia?

Para eso debemos desglosar, de qué hablamos cuando hablamos de millennials. Esta generación se caracteriza por:

  1. Valorar las experiencias por encima de cualquier objeto material.
  2. Preferir trabajar en lo que les apasiona y les motiva, aunque suponga mayor inestabilidad económica.
  3. Vivir el momento sin la ilusión de que pueden controlar el futuro.
  4. Excesivo compromiso social.
  5. Les gusta sentirse únicos, por lo que agradecen servicios hiper-personalizados.

En cuanto al entorno digital es una generación híbrida, por un lado, demuestran un fuerte deseo de compartir sus estilos de vida y momentos en redes sociales; sin embargo, a diferencia de ver el mundo digital como el único existente, muestran una consciente apreciación del mundo fuera de internet. Es una generación enamorada de Instagram, desilusionada de Facebook y consumidora pasiva de Tik Tok. Se le atribuye la creación de la economía a demanda como Uber o Didi. A pesar de ser una generación que aprecia el humor y la ironía, también se caracteriza por ser la generación propensa a las cancelaciones, especialmente en situaciones relacionadas con chistes de humor negro. Su actitud más ligera se ve contrarrestada por una sensibilidad marcada hacia ciertos temas, lo que refleja la complejidad y la dualidad inherente a esta generación.Es una generación que quiere transparencia e inmediatez en marcas e instituciones públicas. Por eso cualquier escándalo se hace viral. Muchas veces sin verificación. 

Por otra parte, esta generación consume contenidos de manera diversa y fragmentada, si bien son los mayores consumidores de podcast, también lo es de historias, de videoblogs o de influencers. Aunque su consumo es fragmentado, sí pueden hacerse fieles a una marca, e incluso ser embajadores de la misma. Netflix y Spotify son aliados de esta generación. 

En lo que respecta a los hábitos económicos, diversos informes resaltan que esta generación se caracteriza por percibir salarios más bajos y enfrentar mayor inestabilidad laboral en comparación con otras generaciones. Estos factores se traducen en una serie de efectos, tales como:

  1. Pago alto de la renta de vivienda, que en algunas ciudades puede identificarse en hasta más de 50% del salario, como en Ciudad de México.
  2. Diferentes hábitos alimenticios: Los hogares con jefatura millennial tienen importantes reducciones en los gastos en los grupos de alimentos de verduras, carnes, frutas y tubérculos, en comparación a los hogares con jefatura de la generación X.
  3. Menor probabilidad de adquisición de vivienda.
  4. Dificultades de ahorro para el retiro.
  5. Dificultades para adquirir servicios de salud.
  6. Problemas de deuda y manejo de tarjetas de crédito.

En cuanto a cultura política podemos afirmar que la generación millennial tiene las siguientes características:

  • La mayoría cuenta con credencial de elector.
  • La mitad participó y quiere participar en elecciones.
  • Confía menos en las autoridades electorales.
  • No confía en autoridades municipales y estatales.
  • Son demócratas: quieren un gobierno donde la mayoría toma de decisiones.

Fuente: Datos de la Encuesta Nacional de Cultura Cívica 2020. 

Estas características se reflejan en los siguientes efectos que podemos constatar en el proceso electoral de 2024, desde las precampañas:

  1. Mayor aceptación a candidaturas diversas como personas con discapacidad, mujeres o miembros de la comunidad LGBTQI+.
  2. Mayor aceptación a la agenda de medio ambiente y de género.
  3. Campañas enfocadas a las redes sociales: contenido para Instagram y Tik Tok.
  4. Slogans más frescos e irreverentes.
  5. Propuestas que atiendan sus necesidades.

La popularidad de las candidaturas de Samuel García y Mariana Rodríguez podría atribuirse al tono marcadamente millennial adoptado en sus campañas.

¿Qué luchas generacionales se pueden presenciar?

Destacando lo anterior, entre millennial, baby boomer y X, se destacan discrepancias significativas. Entre ellas, destacan la falta de aceptación de la pluralidad y la resistencia a adoptar nuevas agendas. Estas generaciones no dan importancia a los acontecimientos en internet y en redes sociales, en comparación con la atención que presentan los  millennials. Asimismo se observan contrastes marcados en los hábitos de consumo y preferencias electorales. Por otro lado, se identifican características distintivas en las propuestas políticas, donde algunas medidas como el aumento de las vacaciones o la extensión de los días de licencia de paternidad son atractivas.

Reflexiones millennials 

Ante la elección más millennial de la historia, vale la pena reflexionar sobre los retos que veremos en las campañas políticas:

  1. Auge de inteligencia artificial en contenidos para redes sociales.
  2. Enfoque en contenidos más humorísticos y virales.
  3. Adopción de narrativas irreverentes.
  4. Presentación de propuestas que aborden las necesidades millennial como: condiciones laborales, igualdad de género e inclusión.
  5. Campañas menos tradicionales, más irreverentes y desenfadadas.

Es esencial que las autoridades, candidaturas y agencias de comunicación reconozcan la importancia de dirigirse al electorado con un tono que conecte con los millennials. Existe el riesgo de que los videos, narrativas, spots y propuestas sean ignorados si no se toma en cuenta esta consideración. Además, es relevante atender la necesidad de encontrar un equilibrio adecuado al adoptar un enfoque millennial, ya que forzar o descontextualizar dicho tono puede fácilmente caer en la ridiculez.

En este 2024, o se habla millennial o nadie será escuchado. 

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