Muere Paquita la del Barrio a los 77 años: Adiós a la a Voz que Desafió a los ‘Inútiles’

Este 17 de febrero de 2025, el mundo de la música mexicana se vistió de luto con el fallecimiento de Francisca Viveros Barradas, mejor conocida como Paquita la del Barrio, en su casa de Veracruz debido a complicaciones de salud. La icónica intérprete, reconocida por su estilo inconfundible y letras de empoderamiento femenino, deja tras de sí un legado que marcó la cultura popular durante más de cinco décadas.
Los últimos años de Paquita estuvieron marcados por problemas de salud que la alejaron de los escenarios. En 2015, fue hospitalizada de emergencia por una úlcera gástrica, y en 2019 enfrentó una trombosis pulmonar y neumonía que la mantuvieron en terapia intensiva. Durante la pandemia de COVID-19, sufrió una caída que le lastimó las costillas y, en 2022, el dolor en el nervio ciático la obligó a reducir sus presentaciones. Pese a estas dificultades, continuó apareciendo en eventos con el apoyo de una silla de ruedas, demostrando su compromiso con su público hasta el final.
Una Vida Forjada en la Adversidad
Nacida el 2 de abril de 1947 en Alto Lucero, Veracruz, Paquita enfrentó desde su infancia la dureza de la pobreza. La música se convirtió en su refugio y vocación desde temprana edad, aunque sus circunstancias la obligaron a dejar la escuela después de la primaria. Trabajó desde joven y, a los 16 años, inició su carrera laboral en el Registro Civil, donde conoció a su primer esposo, Miguel Gerardo Martínez, un hombre 30 años mayor que ella y casado, una realidad que descubrió demasiado tarde.
El desengaño y el maltrato fueron constantes en su vida sentimental, lo que la llevó a tomar decisiones determinantes. Tras separarse de su primer esposo, se trasladó a la Ciudad de México junto a su hermana Viola, con quien formó el dueto Las Golondrinas. Sin embargo, la oportunidad de su hermana de irse de gira por Sudamérica fracturó su relación y Paquita se alejó temporalmente de la música, dedicándose a la gastronomía con una fonda de comida mexicana.
De la Adversidad al Éxito Musical
A finales de los años 70, la tragedia volvió a golpear su vida cuando perdió a sus gemelos poco después de su nacimiento y, meses más tarde, a su madre. A pesar de estos duros momentos, Paquita decidió apostar de nuevo por su carrera artística, grabando su primer disco, El barrio de los faroles, con su propio dinero en 1984. Su estilo directo, sarcástico y lleno de reproches a la infidelidad masculina conectó con un público amplio y le valió el reconocimiento de la industria musical.
Con canciones como Rata de dos patas, Tres veces te engañé y Cheque en blanco, Paquita se convirtió en la voz de muchas mujeres que encontraron en sus letras un desahogo a sus propias experiencias de desamor y traición. Su frase “¿Me estás oyendo, inútil?”, nacida de un espontáneo episodio con su segundo esposo, Alfonso Martínez, se volvió icónica y definió su identidad artística.
Una Trayectoria Reconocida
Paquita la del Barrio no solo fue un fenómeno popular, sino también una artista reconocida por la crítica. Fue nominada al Grammy en varias ocasiones en la categoría de música ranchera con los álbumes Puro Dolor (2007), Eres un farsante(2010) y Romeo y su nieta (2013). Su estilo musical y su postura desafiante frente a los convencionalismos la hicieron compartir escenario con figuras como Juan Gabriel, Vicente Fernández y Ricardo Arjona, además de recibir homenajes en premios Billboard.
Su incursión en la actuación también dejó huella en el cine y la televisión con participaciones en telenovelas y películas como Cansada de besar sapos (2006) y Amor de barrio (2015). Aunque no protagonizó grandes producciones, su presencia siempre fue sinónimo de autenticidad y carisma.
El Adiós a una Leyenda
El fallecimiento de Paquita la del Barrio fue anunciado a través de un comunicado en sus redes sociales, en el que su familia pidió respeto y privacidad en estos momentos de duelo. Su legado, sin embargo, perdurará en la música ranchera y en la memoria colectiva de generaciones que encontraron en su voz un himno de resistencia frente a la adversidad del amor y la vida.
“Sus aplausos me los llevo hasta la tumba”, declaró en una de sus últimas presentaciones, dejando claro que su vínculo con el público jamás se rompería. Más allá de la polémica y las dificultades que marcaron su camino, Paquita la del Barrio se consagra como una de las figuras más representativas de la música popular mexicana, una mujer que, con su inquebrantable estilo, transformó el dolor en canciones y se convirtió en un símbolo de fortaleza para muchas mujeres en el mundo.