Falleció la artista plástica Joy Laville

Falleció La pintora y escultora Joy Laville, nacida en Inglaterra y nacionalizada mexicana en 1986, reconocida por sus cuadros de “sencillos escenarios, poblados por callados transeúntes o mudos personajes en reposo”

Este viernes 13 de abril el historiador Enrique Krauze confirmó a través de Twitter la muerte de Joy Laville, pintora, escultora, y viuda del escritor mexicano Jorge Ibargüengoitia. La artista plástica murió a los 94 años, tras sufrir un derrame cerebral en Cuernavaca, donde radicaba.

Helene Joy Laville Perren, Inglesa de nacimiento, llegó a México en 1956 y por 12 años vivió en San Miguel de Allende, Guanajuato. Se nacionalizó como mexicana en 1986, tres años después de la muerte de Ibargüengoitia en un accidente aéreo en Madrid, España. Con el escritor mexicano contrajo nupcias en 1973 y vivieron en lugares como Inglaterra, Grecia y España.

Desde 1966 expuso su obra en diferentes estados de la República. Fue galardonada con el Premio Nacional de Ciencias y Artes 2012. La artista también expuso en Nueva York, Nueva Orleans, Dallas, Washington, Toronto, París, Londres y Barcelona.

La pintora es  reconocida por sus cuadros de “sencillos escenarios, poblados por callados transeúntes o mudos personajes en reposo”, según el crítico de arte Jorge Alberto Manrique.

Interesada en el arte desde temprana edad, sus estudios se vieron interrumpidos por el estallido de la Segunda Guerra Mundial. A los 21 años contrajo matrimonio con Kenneth Rowe, un artillero de la Fuerza Aérea Canadiense, con quien se fue a vivir a Canadá por nueve años, y padre de su único hijo Trevor Rowe.

En 1956 Laville y Trevor llegaron a México, en donde se convirtió en una artista. “Empecé a pintar en serio en México, entonces soy una pintora mexicana”, expresó Laville entrevistada por La Jornada con motivo de la entrega de la Medalla Bellas Artes en 2012. Hace 52 años había recibido el Premio de Adquisición por el Palacio de Bellas Artes en la exposición Confrontación ‘66.

Laville y Jorge Ibargüengoitia, quien fuera su esposo, se conocieron en una librería donde ella trabajaba: “Ese fue el inicio de los 20 años más felices de su vida. Con él compartió viajes, lecturas, amigos, y como creadores mantuvieron siempre una actitud crítica en relación a la obra de arte”, escribió Beatriz Mackenzie en 1987 con motivo de una exposición de la pintora en el Instituto Cultural de Tabasco.

Tras algunos años de vivir juntos, la pareja se casó en 1973. En ocasión de una muestra en 1967 en la Galería de Arte Mexicano, Ibargüengoitia escribió: “Desde hace un año vivo con una mujer lila. Cuando abro los ojos, cada mañana, la veo en su postura habitual: está de pie, en medio de una habitación verde, junto a dos sillas disparejas y un foco eléctrico apagado; desnuda, con los brazos un poco echados hacia atrás, como esperando a que alguien le tome una fotografía. Por la ventana que está a su espalda se ve la noche de luna, o, mejor dicho, la luz de la luna que ilumina unos muros con enredaderas y un árbol. Entre el follaje del árbol hay una pequeña, misteriosa y brillante luz anaranjada.

_____

_____

“La otra ventana de la habitación da a otra noche, mucho más oscura. A veces, me acerco y busco a la mujer, y allí está siempre, esperando. Otras veces, busco la pequeña luz anaranjada que brilla entre el follaje del árbol; siempre la encuentro y siempre me da gusto encontrarla. La mujer, la luz, el árbol y la noche están en un cuadro de Joy Laville”.

Obviamente, era su pintora predilecta: “Joy Laville sabe ver, sabe recordar, sabe poner colores sobre una superficie plana, y tiene la rara virtud de poder participar en el pequeño mundo que la rodea. Es posible que si fuera daltónica y miope, sería de todas maneras mi pintora predilecta, pero, en este caso, sus cuadros no estarían colgados en mi habitación”.

Ibargüengoitia falleció en un accidente aéreo cerca de Madrid el 27 de noviembre de 1983. Según Lelia Driben, con la muerte de su marido, Joy –se había quedado en París– “pierde su brújula pero no su arte”. Al año regresó a México y se fue a vivir al campo, a Jiutepec, en las afueras de Cuernavaca.

TV UNAM transmitirá un programa especial in memoriam llamado “El universo pictórico de Joy Laville”. La cita es el 14 de abril a las 16:30 horas.

Con información de La Jornada.

Previo

Archivos libidinales: entre promesa y oferta

Siguiente

'Afuera', teatro físico sobre el fracaso y el impedimento muy al estilo Beckett

Sin comentarios

Deja un comentario