Tsotsiles de Aldama piensan en la autodefensa ante la indiferencia del Gobierno

El pueblo tsotsil del municipio de Aldama, Chiapas, denunció el respaldo de las autoridades a los grupos armados de Santa Martha, Chenalhó, que han intensificado los ataques en sus comunidades, y advirtió que ya no permitirán más agresiones en contra de sus pueblos. “Si los grupos armados de corte paramilitar no se detienen en agredirnos con armas de fuego, nos obligan a defendernos”, aseguraron los pobladores.

“Decimos ¡basta!, y lo repetimos una y otra vez, porque nos están obligando a defendernos. No somos los agresores. No somos los invasores. Somos los desplazados forzados internos”, reiteraron.

Los tsotsiles de Aldama señalaron que los grupos armados en sus comunidades han dejado “muertos, decenas de heridos, desplazamientos forzados internos, pérdida de cosechas, quema de casas”, sin que las autoridades hayan intervenido a pesar de las mesas de diálogo sostenidas con los tres niveles de gobierno.

El conflicto, con los ataques de armas de fuego y los desplazamientos forzados, proviene desde el 2014 pero ahora se ha intensificado. Coincidiendo con la entrada del Tren Maya, hay quienes piensan que se trata de una estrategia para dividir a los pueblos de la zona e imponer el emblemático megaproyecto de la cuarta transformación.

Las propias bases de apoyo del EZLN han denunciado los ataques, acusando a los tres niveles del gobierno de financiarlos, en un video de febrero del año pasado una mujer de Coltzinam lo expresaba de esta forma: “Se ve bien claro, tiroteos, agresiones, ráfagas de fuego y bala. No creemos que un indígena pueda comprar miles de balas cada día”, explicó una de las mujeres de Cotzilnam.

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Los ataques armados por una disputa de 60 hectáreas se intensificaron desde el 13 de agosto, cuando se registraron once agresiones. Las comunidades afectadas son Coco’, Xuxch’en, Tabak, San Pedro Cotzlina’m, Yeton, Ch’ivit, Stselej Potov tik, Cabecera Aldama, Juxton y Ch’ayomte’.

Los pobladores exigieron un alto a los ataques armados, la libertad “inmediata e incondicional” del defensor Cristóbal Santiz Jiménez y el cese a la criminalización de comuneros y representantes tsotsiles de Aldama.

Con información de La Jornada, LadoB, Chiapas paralelo y Radio Zapatista