Cómo mejorar tu estrategia de marketing con el benchmarking
Muchas empresas creen que vigilar a la competencia es un aspecto importante. A veces lo hacen por simple morbo, otras para intentar averiguar cuál es el secreto de por qué estas venden más que uno mismo.
Pero, ¿de qué sirve controlar a tus competidores si no sabes lo que hacer con lo que observas de ellos? Aquí es cuando entra en juego la idea de benchmarking, una técnica que sirve para mejorar día a día.
Puede que sea la primera vez que escuchas este término por lo que a continuación, vamos a contarte por qué es imprescindible hacer un benchmarking de éxito en tu empresa.
¿Qué es el benchmarking?
El benchmarking aplicado al marketing podemos definirlo como un proceso de análisis de la competencia que sirve de ayuda para mejorar la estrategia de marketing de cualquier empresa para conseguir diferenciarnos en el mismo sector. Eso sí, el benchmarking no significa copiar lo que hace la competencia. Ya que, si pierdes aquello que te identifica, estás perdido. La imagen de marca, su misión, sus valores, y en general, todo el branding de tu empresa, son la particularidad de tu marca.
Pese a que no debes dejar de ser lo que eres, eso no quiere decir que no debas mejorar. Por lo que, cabe destacar que el benchmarking significa ni más ni menos, que aprender del estudio que se ha hecho de la competencia para mejorar tus procesos.
Este es uno de los puntos más importantes del benchmarking, no vamos a copiar a la competencia, sino que vamos a observarla y esto nos va a servir para aprender de ellos y para innovar y mejorar aspectos de nuestro negocio para conseguir diferenciarnos. Por tanto, el benchmarking es mejorar, diferenciarte y renovar de tu competencia.
¿Qué tipos de benchmarking puedes utilizar en tu negocio?
Obviamente, aquello de lo que puedes beneficiarte de la competencia es esos aspectos de tu marca que necesiten una mejora.
No obstante, dependiendo del momento en el que se encuentre tu marca, puedes aplicarlo en diferentes áreas y con diferentes finalidades.
– Benchmarking interno
Este tipo de benchmarking se desarrolla dentro de tu empresa. Esto quiere decir, que lo comparas con las diferentes franquicias, delegaciones o departamentos de la marca.
En este caso, nos centraríamos en nosotros mismos para poder hacer un estudio de los procedimientos que ese departamento tiene y que la hace ser más rentable que aquella que quieres mejorar.
– Benchmarking externo
Este tipo de benchmarking es el más habitual. Con este sí que se hace un estudio previo de la competencia. Además, es conveniente hacer un DAFO para que tengamos una idea de la posición en la que estamos en nuestro sector.
No obstante, una vez que tengamos los datos extraídos, procederemos a mejorar nuestra estrategia de marketing y nuestro posicionamiento.
– Benchmarking funcional
Llegamos a este punto, es momento de tener en mente un mercado global, y avanzar con tu negocio respecto a todo el entorno de empresas que se encuentran en tu sector, pertenezcan a tu círculo de influencia o no.
Puedes echarle un vistazo a estos y mejorar sus puntos más flojos, esto podría abrirte la puerta a otros mercados que no estaban en tus planes a día de hoy.
– Benchmarking integral
Este tipo tiene como objetivo llevar a cabo los tres análisis de la competencia que se han mencionado anteriormente.
Es posible, que este no sea el tipo más recomendable de usar, ya que necesitarás grandes recursos económicos, de personal y de herramientas de análisis e interpretación.
Lo aconsejable, es llevar a cabo las diferentes mejoras e ir estableciéndolas poco a poco. Ya que de esta forma harás que los empleados de la empresa se vayan adaptando poco a poco a los cambios que puedan ir surgiendo.
Ventajas del benchmarking
A continuación, vamos a destacar algunos de los beneficios que tiene para tu marca poner en marcha el proceso de benchmarking.
1. Mejora tu posicionamiento en los buscadores
Analizando a la competencia podrás descubrir las palabras claves con las que ellos consiguen posicionarse en los buscadores.
2. Incrementa el conocimiento de tu target
El benchmarking de la competencia se enfrenta a un público que se tiene en común. Si observas y llevas a cabo investigaciones para comprobar qué relación se establece entre ellos, podrás mejorar el engagement que tu marca tiene.
3. Pone en marcha mejoras en tu estrategia de marketing
El benchmarking te lleva a fijarte en la planificación que ya habías determinado previamente. Esto te ayuda a darte cuenta de los puntos débiles que tienen nuestros procedimientos y requiere unas mejoras que llevan a la marca a liderar el mercado.
4. Sirve para conocer a tus competidores
Es evidente, que llevar a cabo un análisis de la competencia te va a dar la posibilidad de conocer a aquellos a los que te enfrentas. De esta forma, también conocerás sus recursos, sus armas. A través de este análisis, también puedes darte cuenta de las redes que utilizan, los anuncios que publican y en qué medio lo publica.
1 comentario
Tu información es muy interesante. Gracias por compartir