El otro Darwin: Fue el propio Wallace quien despreció su lugar en la historia

El nombre de Darwin está eternamente ligado a uno de los avances científicos más trascendentales de todos los tiempos (la Teoría de la Evolución por la Selección Natural), mientras que su co-descubridor, Alfred Russel Wallace, que acuñó la frase “origen de las especies”, ha sido en gran parte olvidado. Ahora un archivo recién revelado de las cartas de Wallace proporciona una visión notable de cómo llegó a ser el perdedor de la teoría evolutiva.

Contrariamente a las afirmaciones de que Wallace fue engañado para quitarle su lugar legítimo en la historia, surge un cuadro de un hombre profundamente temoroso de la pompa y circunstancia, que consideró los honores que le concedieron durante su vida como algo que le causaba molestia.

En una carta a su editor, James Marchant, Wallace se queja de que está “bastante cansado de las medallas”, después de haber recibido casi todos los premios a disposición de la Royal Society. También menciona que fue invitado a posar para el artista John Collier, cuya obra maestra inmortalizó la imagen de Charles Darwin – pero inmediatamente lo rechazó. “Creo que es posible que haya declinado de forma abrupta y quizás Collier se haya sentido herido”, escribió Wallace.

Las cartas son parte de una colección privada que también incluye notas escritas a mano para un libro titulado ‘Darwin y Wallace’, que el científico y su editor estaban trabajando en la época de la muerte de Wallace en 1913. El bosquejo del libro, que no se terminó, va a subasta la próxima semana.

El Dr. George Beccaloni, director del Proyecto de Correspondencia de Alfred Russel Wallace, describe las 24 cartas como “fascinantes”; “Demuestran que Wallace no era muy autopublicista. Se perdió algunos golpes de publicidad muy buenos “.

Por el contrario, James Marchant se presenta como un operador experto, cuyos planes para asegurar el legado de Wallace fracasaron continuamente por la indiferencia del científico a la fama y la gloria. La colección también incluye una carta fechada poco antes de la muerte de Wallace de su hijo William a Marchant, respondiendo a una sugerencia para su padre fuera enterrado en la abadía de Westminster. “Ni mi madre ni mi padre lo desearían”, escribe William Wallace. “Todos nosotros somos reacios a la publicidad y a la ceremonia innecesaria”.

El esbozo del manuscrito describe cómo Wallace y Darwin lograron llegar al mismo descubrimiento, y a pesar de describirlos como “co-descubridores” Wallace constantemente se refiere al “darwinismo”. Wallace había escrito inicialmente a Darwin desde la remota isla indonesia de Halmahera para compartir su idea revolucionaria. Darwin, que independientemente había estado desarrollando esta misma idea durante más de una década, fue convencido para que ambas versiones fueran leídas a los miembros de la Sociedad Linneana en 1858.

Durante los últimos años ha resurgido el interés por Wallace, con el Museo de Historia Natural restaurando su retrato en la sala principal del museo y con varios documentales que destacan sus considerables contribuciones y que, en algunos casos, apuntan con el dedo a sus contemporáneos como culpables por su posterior descenso en la oscuridad. “La gente ha especulado sin cesar sobre esto”, dijo Beccaloni. “Algunos han dicho que fue el ‘establishment científico’ que golpeaba a Wallace debido a sus creencias espiritualistas. Pero yo creo que básicamente fue culpa suya”.

Beccaloni señala la correspondencia publicada anteriormente en la que Wallace menciona que le han otorgado la Orden del Mérito, uno de los más altos honores que puede otorgar a un civil. En la carta a uno de sus amigos, Wallace confiesa que se ha negado a asistir a la ceremonia en el Palacio de Buckingham – en parte porque no quiere comprar un nuevo traje para la ocasión. Por esta razón, el rey tuvo que enviar un dignatario a la casa de Wallace en Dorset para entregar el medallón.

Sandra Knapp, responsable de algas, hongos y plantas en el Museo de Historia Natural, estuvo de acuerdo en que la noción de que Wallace fue despojado de su lugar en la historia es un mito. “Hay una caricatura de estos científicos sentados en su habitación tratando de recoger a todos los demás o ser totalmente socialmente disfuncional”, dijo. También manifesgó que si la gente mirara con mayor profundidad se preguntarían ¿Quién acuñó la palabra darwinismo?… y la respuesta es sorprendente porque fue el propio Wallace.

Knapp ha acogido con beneplácito el renovado interés en el trabajo de Wallace. “Wallace era un gran personaje”, dijo. “Es como tu amigo gruñón que no va a ninguna de estas reuniones donde puede hacer amigos e influir en la gente”. ¿Y qué diría Wallace sobre los esfuerzos recientes para restaurar su lugar legítimo en la historia? – Creo que sería un poco indiferente -dijo Beccaloni-. “Al igual que lo estuvo en su época por cada medalla importante en Gran Bretaña, estaría un poco exasperado por esto”.

• Con información de The Guardian.
• Selección, traducción y notas del Colectivo Alterius.