Iraníes se cosen la boca en protesta ante el cierre de fronteras
Fotografía: Robert Atanasovski/AFP/Getty
La crisis migratoria en Europa se hace cada vez más grande. Ahora son miles los migrantes que se encuentran atrapados en la periferia del continente, pues algunos países de la región de los Balcanes han endurecido las políticas de paso para servir de filtro a las naciones a las que buscan llegar los refugiados. La llegada del invierno ha hecho aún peor el panorama porque las temperaturas llegan a niveles de congelación.
Este lunes como protesta, seis migrantes iraníes que enfrentan esta situación, se cosieron la boca. Mientras tanto, otros grupos principalmente de marroquíes, iraníes y paquistaníes bloquearon el tráfico ferroviario en la frontera norte de Grecia con Macedonia para exigir su pase a Europa occidental.
Cientos de miles de personas, muchos de ellos sirios, huyen de la guerra. Hacen el viaje a través de la península de los Balcanes, llegan en barcos o lanchas a Grecia desde Turquía con el objetivo de continuar el camino hacia los países más ricos de Europa, principalmente Alemania y Suecia.
Ante la llegada masiva de migrantes, Eslovenia decidió que sólo concedería el paso a personas que huyeran del conflicto en Siria, Irak y Afganistán, que el resto serían considerados “migrantes económicos” y serían enviados de vuelta. Después de este anuncio, Croacia, Serbia y Macedonia, decidieron hacer lo mismo, dejando a un gran número de iraníes, pakistaníes, bangladesíes y otros migrantes procedentes de Asia y África, varados en tiendas de campaña.
Esta nueva medida llega como una política que pretende disminuir la creciente preocupación en el tema de seguridad, a partir de los atentados del 13 de noviembre en París. A pesar de que la mayoría de los atacantes eran ciudadanos franceses y belgas, se comprobó que dos de los atacantes suicidas implicados en los ataques llegaron en barco en Grecia y luego viajaron al norte a través de los Balcanes.
Con Información de ABC y Vice News