Estudiantes sirios resguardan conocimiento y textos en biblioteca subterránea 

¿Cómo y dónde resguardar información o textos académicos para que no sean desaparecidos por el Estado Islamico? Esto es lo mismo que se preguntaron muchos sirios luego de que vieron como fueron destruidos sus monumentos, varios sitios antiguos y parte de su historia en manos de la violencia y los constantes ataques. La respuesta es bajo tierra y donde nadie pueda verles.

Mientras que en unos países lo único que leen son blogs o las tendencias de Twitter, un grupo de estudiantes sirios consideró prudente salvar de los escombros sus libros y creó una bodega literaria, que más adelante se convertiría en una biblioteca con más de 11 mil títulos. La idea nació en 2012 cuando los mismos jóvenes vieron interrumpidos sus estudios debido a la inseguridad y desde entonces el sótano que se encuentra en la ciudad de Daraya, da servicio a todas las personas que busquen refugio en la lectura.

“Con los jóvenes como yo que tuvimos que dejar los estudios, los graduados y jóvenes tuvimos la idea de recuperar los libros que estaban bajo los escombros de casas demolidas. Nos ocupamos de señalar en qué casas destruidas fueron encontrados para identificar a sus propietarios. Una vez que la guerra haya terminado, pensamos devolverlos a sus propietarios. También recogimos libros que no se han quemado en las bibliotecas y librerías de la ciudad. Era una manera de salvar nuestro patrimonio cultural”.

Abu Malek, quien es el fundador del proyecto dice que con la creación de la biblioteca se ha encontrado un nuevo propósito entre los jóvenes y ya no pasan días enteros con aburrimiento o con la angustia de otro atentado, “por ahora yo aconsejo a que todos vengan a consultar libros y dialoguemos sobre las lecturas, más adelante también completaremos nuestra colección de películas documentales” aseguró Malek.

Vía M-X