El poeta nahua Natalio Hernández será reconocido protagonista de la literatura mexicana
"Las lenguas nacionales nos pertenecen, son lenguas milenarias: el español tiene mil años, el náhuatl tiene cinco mil. Necesitamos ser antiguos y modernos”, expresó el escritor Natalio Hernández al respecto del reconocimiento que recibirá.
La labor del ensayista y poeta veracruzano Natalio Hernández constituye un parteaguas en la creación y promoción de la literatura en lenguas originarias de México. Amigos y colegas reconocerán el legado de este escritor nahua como parte del ciclo Protagonistas de la literatura mexicana, en el que participarán Esther Hernández Palacios, Miguel León-Portilla, Víctor M. Toledo y el autor. La cita es el domingo 5 de agosto a las 12 h en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes.
Natalio Hernández es originario de Ixhuatlán de Madero, Veracruz, donde nació en 1947, en el seno de una familia cuya lengua era el náhuatl. “El español lo sufrí”, compartió el escritor en entrevista para el INBA, y recordó sus años de primaria, donde tuvo un primer contacto con su otra lengua. “No fue nada grato, porque el maestro de ese tiempo venía de la corriente de maestros rurales que decían o hablas español o hablas español”. El autor de poemarios como Collar de flores (1985) y Veinte flores: una sola flor (1987) reconoce que todo el mundo natural, mítico, místico y luminoso lo aprendió en su lengua materna a través de sus padres.
No han sido pocos los reconocimientos que a lo largo de su carrera ha cosechado Natalio Hernández, pues su obra ha sido traducida a diversos idiomas y lo ha llevado a recorrer diversos recitales de poesía tanto nacionales como internacionales y, en 2008, por encargo de la Comisión del Bicentenario del Senado de la República, tradujo la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos a la lengua náhuatl. En 1997 ganó el Premio Nezahualcóyotl de Literatura en Lenguas Indígenas, el más importante en su tipo.
Una de las cosas que más entusiasma actualmente a Natalio Hernández es la revaloración de las lenguas de México. “Cuando decimos literatura mexicana del siglo XX en realidad es literatura en lengua española. Carlos Montemayor hablaba de que uno de los fenómenos más importantes es la emergencia de la literatura en lenguas mexicanas, una literatura que se construye a partir de lenguas originarias de México. El español es una lengua extranjera que ya hicimos nuestra. Las verdaderas lenguas mexicanas son el maya, el náhuatl, el zapoteco, el mixteco, en fin, las más de 60 lenguas que se hablan en nuestro territorio”, expresó el escritor.
Y subrayó: “Las lenguas oprimidas en cada uno de los países están ahora interpelándonos a través de la poesía, la novela, la lectura”.
A pesar de que en 2004 se aprobó la Ley de Derechos Lingüísticos, donde se estipula que todas las lenguas de México son lenguas nacionales y tienen el mismo estatus que el español, hay muchos prejuicios, comentó Hernández, y le gustaría que en algunas décadas todos los mexicanos asuman la lengua de la región de donde son originarios.
“Ese es el reto del sistema educativo del siglo XXI, que tiene que dar respuesta a la diversidad de las lenguas que tiene México. Lo decimos a nivel de discurso político, académico e ideológico. Lo tenemos que asumir como una práctica cotidiana para relacionarnos entre mestizos y miembros de los pueblos originarios en una relación de dignidad y enriquecimiento mutuo. Las lenguas nacionales nos pertenecen, son lenguas milenarias: el español tiene mil años, el náhuatl tiene cinco mil. Necesitamos ser antiguos y modernos”, expresó el poeta nahua.
Y agregó: “No somos un pueblo ignorante, tenemos una gran cultura, pero nuestro pensamiento europeo no nos permite comprender nuestra riqueza, nuestro mundo ancestral, por eso la entrada al Palacio de Bellas Artes como uno de los homenajeados me honra mucho, pero también me compromete a ser más humilde, más modesto, me compromete a escuchar al otro”, finalizó.