¿Por qué los jóvenes quieren cobrar por adelantado y hacer home office? Porque no les alcanza, Derbez

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Eugenio Derbez tenía una narrativa interesante a nivel mediático. Era ese mexicano que dió el famoso, ansiado y sobrevaluado crossover en Hollywood. Su ídolo es Adam Sandler, desde el tipo de papeles hasta la manera de venderse en este segundo aire,  y se volvió una estrella con niveles de taquillas atractivos en relación a la inversión típica para una película de comedia de rango menor.  Superó también la ira y yugo de Televisa, con una sonada aparición en Ventaneando a mediados de los dosmiles. En el camino hubo tropezones, como la obligación contractual de ir a “hacer comedia” en un mundial reciente  para los de San Ángel.

Era  un tipo amado por el gran público. Los números lo demuestran, ya que los latinos que crecieron con él abarrotaron las salas de cine gringas para ver su última película. Nivel estar segundo lugar luego de la secuela de Avengers que rompió récords de taquilla.

Las giras de prensa sacan lo peor de los entrevistados. En serio, ¿recuerdan las desastrosa de Avengers: Age of Ultron?, y es que en teoría es una mala combinación: presentadores banales, estrellas hartas y cansadas, junto a sinergías mediáticas que parecerían inofensiva prensa gratis. Y alguien la riega. Ahora fue Derbez al manifestar que él no votaría por Andrés Manuel López Obrador en medio de su gira de prensa por Overboard. La estrella busca promocionar su producto, los medios buscan sacar algo más que un comercial. Eso es una receta para el desastre.

En un segundo round, en otra entrevista inútil y desechable [ahora con Adela Micha], ofreció comentarios insensibles sobre la fuerza de trabajo millenial:

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Vayamos por puntos, respondidos por alguien (el que escribe) que estadísticamente es un millenial:

  • Derbez se queja de que los jóvenes quieren cobrar por adelantado: Muchas veces, en México uno no tiene ni para el camión en el que se va ir a trabajar. Es real. Me ha pasado y a muchos amigos. En variados rangos de sueldo. Aparte es algo importante para motivarse, especialmente si será un trabajo freelance no facturado. El comediante parte de una realidad donde cada joven tiene ahorros para sostener la primer quincena, hay a quienes los ayudan sus padres pero a otros miles no. No es mala planeación, a veces no hay porque no hay. 

  • Derbez también cuestiona que una de las primeras preguntas sea el salario o presupuesto. Aquí soy algo empático con él, ya que es una descortesía profesional ni siquiera saber de que va el proyecto y estar preguntando los honorarios. Es molesto y una falta de sentido común. Sin embargo, también soy empático con aquellos colegas que tienen esa prioridad. A veces es la desesperación. Otras tantas, una suficiencia (proveniente del privilegio de los menos) marca para ni perder mi tiempo. Yo considero que hay presupuestos que pueden ajustarse al esfuerzo y tiempo, hay que estar abiertos, compañeros generacionales.

  • Adela Micha dio la nota en años pasados gracias a que quiso invitar a una personalidad emergente de las redes sociales a trabajar gratis para ella. Se trata del caso de La Mars Aguirre, quien simplemente vuelve humanidad aquel dicho de dejemos de hacer famosa a la gente estúpida. Pero los seres humanos de cualquier inteligencia merecen cobrar si se va ocupar su tiempo y Micha pensó que le estaba haciendo el favor a la youtuber.

  • El vídeo donde Micha hablaba de porque no tuvo a La Mars colaborando es para la historia. Una clase maestra sobre la desconexión de dos generaciones. Claro que La Mars está en todo su derecho de profesionalizar su carrera (aunque sea un desperdicio de banda ancha) y dirigir a Micha con su representante. Y es la ex conductora de Televisa es quien no acaba de entender que no por ser joven (y ella Adela Micha) se debe tomar como un favor la invitación a colaborar en un espacio patrocinado, con presupuesto y  respaldado por una empresa mediática de recursos considerables.
  • Lo menciono porque justamente es el mismo problema en el argumento que Micha otorga a Derbez, quien se queja de un hipotético caso donde un experto en redes sociales pone condiciones para aceptar el trabajo, desde horarios hasta expectativa salarial y hacer home office. Micha insiste en que el joven debería estar agradecido de trabajar con Eugenio Derbez, él se lo está ofreciendo. Casi casi que como en esta chaqueta mental Eugenio es su ídolo, debería ponerse a trabajar y preguntar eso luego.
  • Hablando de la queja de Derbez sobre el home office. ¿Sabrá el comediante que en verdad es una pérdida de tiempo trasladarse a una oficina, además de ecocidio por la gasolina, el juntarse para realizar cosas que se pueden a distancia? ¿Cómo manejar redes sociales tan cómo en su ejemplo?

  • Otra razón para definir y negociar presupuestos: Muchas veces los jóvenes entran a proyectos donde ellos ponen equipo en el que han invertido: cámaras, computadoras, tarjetas de memoria, discos duros, tabletas de dibujo, tarjetas de vídeo especializadas, tripies y hasta drones. Así es la economía de la Generación Y. No te cobro sólo por los entregables y lo que sé, sino por todo mi equipo. 

A una persona que amo alguna vez la cuestionaron en una negociación laboral lo siguiente: – ¿Por qué pides tanto? – Por el Uber – Ahorra para un coche – No me alcanza – Vete en camión, no te va a rendir el sueldo – Me llevo mi computadora, no arriesgaré mi herramienta de trabajo.

De ese nivel es la insensibilidad de muchos señores con su fuerza de trabajo. La que por mera estadística y sentido común tomará el mundo.

Y Eugenio Derbez validó a todos esos señores que desde su privilegio (ganado o heredado o el que te dan las décadas) que niegan a los jóvenes un mejor futuro, como el pasado que ellos tuvieron en economías más sanas.

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Posdata

Siempre me ha fascinado el tema de la injusta ventaja de aquellos que  sin cobrar pueden jugarsela (en serio, no dos horas por semana) en algún proyecto profesional, político o artístico. Es algo injusto del privilegio y una ventaja no tan reflexionada. Muchos sólo van a la escuela…a estudiar, no a hacer networking en federaciones (no tienen tiempo por el trabajo, o hasta por el camión) o prácticas perpetuas que serán redituables de manera posterior.

Una ventaja más del privilegio. Es muy fácil decirte, vete a ayudar un año. O que te cuenten, contesté teléfonos en la radio un año hasta que me dieron turno al aire. Pero no todos tienen para sostener esas apuestas. Pensemos en eso.

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