Investigadores crean una impresionante flor artificial

Investigadores de la Universidad de Carolina del Norte (EE UU) han diseñado un nuevo material que se puede programar para que cambie de forma de acuerdo a una secuencia temporal preestablecida, que puede durar desde segundos hasta horas. Se trata de un hidrogel con redes moleculares de dos clases: unas permanentes que almacenan la forma final del material y otras temporales que controlan la velocidad.

Como una prueba de concepto, los investigadores han fabricado una flor artificial con pétalos que se abren poco a poco sin necesidad de ningún estímulo externo, como la luz, el calor o las variaciones del pH utilizadas en otros experimentos anteriores. Los detalles se publican esta semana en la sección Nature Communications de la revista Nature.

Diseñada y construida por un estudiante de postgrado, Qiaoxi Li, de la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill, la flor artificial es de unos pocos centímetros de ancho y tarda dos horas hasta que esté abierta.

“Estaba tan sorprendido cuando vi por primera vez la flor” (Sergei Sheiko)

Es una pieza de material muerto. Si se quita la pintura, es sólo polímero blanco. Pero lo importante es que la flor demuestra cómo las capas de polímero se pueden programar para cambiar de forma en un momento elegido.

Las aplicaciones potenciales de este avance serían útiles en la liberación de fármacos o en implantes biomédicos, ya que se podrían fabricar dispositivos plegados, insertarlos a través de una cirugía poco invasiva y expandirse en la forma y momento deseados una vez que estuvieran en su destino.

El equipo de trabajo de Sergei Sheiko, el líder de la investigación que reunió a ocho investigadores de distintas nacionalidades, se centra en el desarrollo de materiales hechos con polímeros que han tenido importantes aplicaciones en múltiples industrias. Si te interesa su labor puedes seguir sus publicaciones en la base de datos académicos de Google.

Con información de Nature y Agencia Sinc