Abren el primer mercado ‘cero residuos’ del mundo
Es claro que uno de los grandes problemas de nuestra relación con el ambiente es caer en el juego de las necesidades creadas por el mercado. La mercadotecnia, definida por sus defensores como el arte de vender, es en realidad el arte de engañar contaminando. La psicología social se ha encargado de reconocer los patrones que nos vuelven consumidores irracionales y dichos patrones son replicados en un devastador sistema de publicidad que genera toneladas de basura, creada con el fin de convencer al comprador.
Ejemplos de sistemas que confrontan este hecho hay muchos, pero el que presentamos acá es de particular interés e importancia, ya que puede ser un referente para cambiar nuestros sistemas de intercambio, compra y venta de productos. Dos chicas alemanas abrieron en Berlín el primer supermercado cero residuos del mundo, donde no se vende ningún producto empaquetado e invita a sus compradores a llevar su propio recipiente para llenarlo con los productos que ellas venden a granel. Algo que hoy día parece una gran novedad pero que nuestros abuelos ya hacían en su vida cotidiana.
La idea detrás de Original Unverpackt, es la de crear un concepto de supermercado que quiere reducir el desperdicio y la confusión añadiendo transparencia a la lista de compras.
Se trata de comprar de forma diferente, acabar con las interminables estanterías repletas de productos que te prometen la vida eterna, compras sin basura. Buscamos el slow food, la basura cero, y estamos en contra de esas palabras de moda sobre conciencia ecológica que algunas marcas utilizan para despistarnos.
En lugar de la batalla de embalajes para los productos que tenemos ahora, donde cada pasillo es un aluvión de anuncios compitiendo por nuestra confianza y atención, tenemos los productos de este supermercado donde puedes elegir cuidadosamente y probar cada producto que ofrecen presentándolos tal y como son.
No solo eso, sino que conscientes de otro fenómeno contaminante como es la inmensa cantidad de bolsas para vender, a los compradores se les pide que traigan sus propios recipientes para comprar a granel, donde la información, características, incluyendo la composición nutricional y su origen, están claramente marcadas.
Milena Glimbovski y Sara Wolf, las creadoras de Original Unverpackt, han estado trabajando en su plan de negocios desde noviembre de 2012. Después de conseguir la inversión necesaria a través de un crowdfunding alemán, doblando su objetivo inicial, su tienda es todo un éxito y ya están proyectando abrir su segunda tienda. Lo cual demuestra que se pueden tener las mejores intenciones respecto al cuidado del ambiente y aún así replicar las necesidades impuestas por el sistema capitalista, es decir apelar al crecimiento económico desmedido, sin considerar que esta lógica de pensamiento es en realidad la base de los problemas ambientales que se buscan combatir. Valdría la pena replicar estos esquemas de negocios, que incluso son valiosos desde la forma de financiamiento por medios comunitarios, pero implementando mecanismos para evitar a toda costa la acumulación de capital.
Con información de Ecoinventos