¿Prohibición o legalización de las armas?
Uno de los grandes temas que el gobierno mexicano y organizaciones de la sociedad civil han intentado dar mayor fuerza dentro de la agenda internacional es la regulación de armas de fuego. Nuestro país se ha visto afectado durante los últimos años por la facilidad con la que grupos del crimen organizado obtienen armamento para combatir a las fuerzas de seguridad del Estado. Si bien en México la venta de armas está fuertemente regulada por el gobierno, países como Estados Unidos permiten la compra de armas con muy pocas restricciones, generando un éxodo de armamento entre la frontera norte de nuestro país. La pregunta que centra el debate sobre la regulación de armas es si la restricción en el acceso de armas disminuiría los homicidios en países como Estados Unidos o México.
En 2006 el Presidente Calderón (2006-2012), dio inicio a una de las políticas que más daño han hecho al país durante los últimos años. La guerra contra las drogas busca erradicar la producción, el tráfico y el consumo de drogas a través de el exterminio del crimen organizado en el país. Sin embargo, durante los últimos 9 años esta guerra está lejos de ganarse y solo ha dejado más de 100 mil muertes y más de 25 mil desaparecidos. Esta dificultad para reducir el poder del crimen organizado viene en parte de la facilidad que tienen los criminales de obtener armas para combatir al gobierno y a bandas rivales. Solamente entre 2010 y 2012 el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos documentó un incremento del 189% en la incautación de armas en la frontera que divide aquel país con el nuestro. La mayoría de las armas utilizadas (armas de asalto y de uso militar), por el crimen organizado provienen del país del norte, el 40% provienen solamente de Texas. De acuerdo con un informe sobre tráfico de armas realizado por el Centro de Estudios Sociales y de Opinión Pública (CESOP), día a día pasan más de 2 mil armas de Estados Unidos a México. Este tráfico de armas hace que en México existan alrededor de 15 millones de armas ilegales. Si tomamos en cuenta los datos de la Procuraduría General de la Republica (PGR), sobre el número de muertes relacionadas al crimen organizado en el país, las armas ilegales provenientes de Estados Unidos han causado la muerte de más de 40 mil personas en México.
En el caso de Estados Unidos, la laxa restricción en la venta de armas también ha causado graves daños a su sociedad. Con base con el estudio realizado por la organización Small Arms Survey, Estados Unidos es el país en el mundo que más armas posee per cápita, con una tasa de 88.8 armas por cada cien mil habitantes. Este alto consumo en armas proviene de la facilidad con que los norteamericanos pueden poseer una. La alta circulación de pistolas en aquel país tiene una estrecha relación con la violencia. De acuerdo con los reportes de la Oficina de las Naciones Unidas en contra de la Droga y el Delito, más del 50% de los homicidios perpetrados en Estados Unidos son llevados a cabo con arma de fuego. En cambio, países como Canadá o Australia tienen una relación menor al 40%. Inclusive en el Reino Unido, los homicidios perpetrados por arma de fuego no rebasan el 20%. Un dato interesante sobre la violencia generada por las armas es que las muertes ocasionadas por armas de fuego en Estados Unidos superan los decesos causados por actos terroristas. Mientras que las armas mataron entre 2001 y 2013 a 406,496 personas, en ese mismo periodo de tiempo solo hubo 3,380 muertes ocasionadas por ataques terroristas.
Una de las principales consecuencias ocasionadas por la facilidad para conseguir armas en aquel país han sido los tiroteos masivos en espacios públicos como escuelas y universidades. Desde la masacre en Columbine, pasando por el tiroteo en Virginia Tech y terminando con el asesinato de 27 niños en una escuela infantil en Connecticut, Estados Unidos ha sufrido por la facilidad con que cualquier persona puede comprar un arma . De acuerdo con datos de la empresa CNN, desde 1997 Estados Unidos ha tenido 51 tiroteos masivos, Alemania 3, Suiza 3, Reino Unido 1, Japón 0 y Australia 0.
A pesar del daño causado por las armas, su fácil acceso al parecer no necesariamente conlleva mayor violencia, como son el caso de México y Estados Unidos. Después de Estados Unidos, Suiza y Finlandia forman parte de la lista de países que más armas tienen per cápita. Sin embargo, la tasa de homicidio por arma de fuego en Suiza y Finlandia es de 0.77 y 0.45 respectivamente. Del lado contrario, México y Estados Unidos tienen una tasa de 9.97 y 2.97 cada uno. Las paradojas que estos datos nos muestran son que 1) no por limitar la venta de armas la violencia disminuye (el caso de México), y 2) como la liberalización en la venta de armas puede tener resultados totalmente opuestos (Estados Unidos y Finlandia o Suiza).
Si bien es complicado poder llegar a una respuesta, es posible entender esta relación entre violencia y armas a través de la posición de Estados Unidos y México en el mercado internacional de las drogas. Mientras el país del norte es el mayor consumidor de droga en el mundo, por el otro lado el 80% de las drogas que ellos consumen pasa por territorio mexicano; esto nos hace uno de los principales países en el mundo por donde se transita droga. Tomando en cuenta de la ilegalidad en cualquier actividad relacionada con las drogas en ambos países, el mercado ilegal de drogas ha sido tomada por distintas bandas del crimen organizado, que al ser carecer de derechos legales o de proteggión del Estado, proceden a adjudicarse sus derechos e intereses por medio de la violencia. La alta competitividad de precios y la alta demanda de drogas hacen que las distintas bandas del crimen organizado busquen ocupar mayor mercado por medio de la violencia. Por lo tanto, el fácil acceso a armas en un escenario de alta competitividad criminal da como resultado un incremento en la violencia.
Es ilusorio pensar que una simple regulación o liberación en las armas puede generar resultados inmediatos en una sociedad. Sin embargo, lo que debe centrarse en el debate sobre las armas de fuego es el contexto en el cual un país se encuentra sumergido. En el caso de Estados Unidos y México, debe tomarse en cuenta que ambos países tienen un rol muy importante en el mercado internacional de drogas pero principalmente identificar la relación que pueda haber entre la postura prohibicionista de las drogas y el fácil acceso a las armas. . Las armas no matan por si solas, pero su fácil acceso en circunstancias especiales puede generar gran número de muertes.