Estado de México: 63 de cada 100 desaparecidas son niñas o adolescentes
En el Estado de México, de las 19 mil 964 mujeres reportadas como desaparecidas de 2015 a 2021, 63 de cada 100 fueron niñas y adolescentes que, se presume, fueron víctimas de trata con tres fines principales: para realizar actividades delictivas, para fines de explotación sexual y para la adopción ilegal.
Estos fueron algunos de los hallazgos del informe “Desaparición de mujeres adolescentes, niñas y niños en el Estado de México”, elaborado por las investigadoras Adriana González y Javiera Donoso Jiménez, la Comisión Nacional de Búsqueda, la Comisión de Búsqueda del Estado de México y la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim).
De acuerdo con las investigadoras, el perfil de las adolescentes desaparecidas es de entre 12 y 17 años de edad, delgadas, solteras, estudiantes de secundaria, y sin antecedentes penales. La investigación también encontró que el mes más común de la desaparición es mayo, a plena luz del día y los días lunes.
Los fines de trata más comunes hallados fueron para realizar actividades criminales. Los grupos criminales las reclutan como novias o con la promesa de incorporarlas en “el negocio”, ya dentro, son víctimas de violencia sexual, explotación sexual, tortura y feminicidio, tomando sus cuerpos como verdaderos “campos de entrenamiento” para sus pares.
En el caso de los varones adolescentes, las organizaciones criminales los hacen copartícipes de los delitos hacia las adolescentes mujeres: reclutamiento, abuso sexual, violación, feminicidio.
Uno de los motivos por los que las mujeres desaparecen, de acuerdo con lo encontrado por las investigadoras, es la violencia de género, porque huyen de sus hogares para protegerse de la violencia que viven, pero una vez desaparecidas, lo más común es que hayan sido asesinadas por sus parejas sentimentales, agresores sexuales criminales que operan en el territorio.
Tanto en agresores sexuales, feminicidas seriales y bandas criminales, se puede observar que sus delitos no son aislados, sino que operan bajo patrones y acciones vinculantes, lo que hace necesario y útil realizar análisis centrados en los aspectos territoriales para la comprensión del problema, detalló la investigación.
La Comisionada de Búsqueda del Edomex, Sol Salgado, quien estuvo en el evento, señaló que la desaparición de niñas y adolescentes tiene un sesgo de género que, aunque va paralelo al tema de criminalidad, debe ser atendido de manera diferenciada.
Por su parte, la directora de Redim, Tania Ramírez, explicó que en el país, 13 niñas, niños y adolescentes fueron reportadas al día como desaparecidas. Si bien en la mayoría de los casos fueron localizadas, en 1 por ciento fueron localizados sin vida y en 20 por ciento de los casos las personas aún continúan desaparecidas. Por sexo, 8 mil 704 eran niñas y 8 mil 72 eran hombres.
La experta en los derechos de las mujeres e integrante del Comité de la CEDAW, Leticia Bonifaz, explicó que a partir de este estudio se observa que la solución para atender esta problemática es un cruce de factores: crimen organizado, redes de trata, atención a víctimas, la baja de poder adquisitivo, educación, entre otros. El problema, sin embargo, es que persiste la falta de comunicación entre las instituciones y órdenes de gobierno.
El informe fue presentado por el embajador de la Unión Europea (UE) en México, Gautier Mignot, quien detalló que esta investigación se desarrolló en el contexto de la declaratoria, en 2019, de la segunda Alerta de Violencia de Género contra Mujeres por desaparición, en siete municipios del Estado de México. Cabe recordar que la primera Alerta emitida para esta entidad fue en 2015 por la violencia feminicida.
Explicó que el propósito de esta investigación es conocer sobre las principales causas de la desaparición de mujeres adolescentes, niñas y niños en el Estado de México, y su vinculación con la trata de personas y la explotación sexual y surgió de un proyecto de cooperación internacional financiado por la UE.
Con información de CIMAC Noticias