Los macacos si tienen autoconciencia
Según los clásicos experimentos, reconocerse en el espejo es señal de auto-conciencia, saber que quien está ahí somos nosotros. Esta habilidad la comparten otros animales como chimpancés y delfines, capaces de reconocerse a sí mismos en un espejo. Esta prueba es el enfoque estándar para determinar la conciencia de sí mismos de los animales, pero no siempre funciona.
Hasta ahora los científicos creían que cuando el test fallaba, los animales no tenían esa capacidad para reconocerse en el espejo o también podía deberse a deficiencias del método empleado, que consiste en que el sujeto toque una marca indeleble en su cara a la vez que se mira al espejo.
Un nuevo estudio, publicado en la revista PNAS, demuestra con un nuevo experimento que los animales –en este caso macacos Rhesus que no pasaron la prueba del espejo en un primer momento–, que estos son capaces de aprender a reconocerse.
Un entrenamiento para reconocerse
El equipo de científicos, liderado por el Instituto de Neurociencia de la Academia China de las Ciencias, sometió a tres ejemplares de macacos a un entrenamiento de asociación visual y proprioceptiva (capacidad de sentir la posición relativa de partes corporales), en el cual los monos aprendieron a tocar una luz láser proyectada en un tablero contiguo. Los animales solo podían ver la luz a través del espejo.
Tras semanas de ejercicios, los macacos fueron capaces de tocar el punto de luz cuando se proyectaba en sus caras, algo que nunca se había intentado durante los entrenamientos. Para los científicos, esto confirma que los macacos sí son conscientes de sí mismos al mirarse al espejo.
A diferencia de los monos no entrenados, los que sí se sometieron a la prueba siguieron reconociéndose en los test posteriores. Según los científicos, el fracaso de la prueba del espejo se puede deber más a la ausencia de asociación visual y propioceptiva en imágenes especulares.
“Por tanto, la autoconciencia corporal puede ser una capacidad cognitiva presente en muchas más especies de las que se pensaba, y la adquisición de asociaciones visuales y propioceptivas precisas en imágenes que aparecen el espejo es crucial para demostrar la habilidad de autoconsciencia del animal”, subrayan los autores en el estudio.
Pero, eso no es todo. Lo que no menciona el estudio es que algunos animales tienen otras formas de reconocerse, debido a que la visión no es uno de los sentidos más desarrollados que poseen, quizá el mejor ejemplo de esto lo ponen los perros pero al respecto vale la pena remitirnos al extenso trabajo del primatólogo Frans de Waal, del que ya hemos hablado en notas anteriores.
Más allá de los nuevos métodos y las aproximaciones más precisas, debemos recordar lo que De Waal denuncia al hablar de nuestra negación sobre la inteligencia animal, ya que como el mismo dice “durante mucho tiempo se han medido las capacidades animales según los estándares humanos, ignorando la inmensa variación en las maneras de percibir el mundo”. Por eso el experimentado etólogo llama a la empatía como medio para entender a otras especies. “En vez de convertir a la humanidad en la medida de todas las cosas, tenemos que evaluar a las otras especies por lo que son ellas mismas”.
Con información de Agencia Sinc | Edición y comentarios del Proyecto Alterius