Puebla: Ayuntamiento admite que tiene infiltradas en colectivas feministas
Ahora que está de moda que las autoridades reconozcan que el espionaje es una práctica común contra activistas, defensores de derechos humanos, periodistas e incluso religiosos, Jorge Cruz Lepe, el secretario de Gobernación Municipal del estado de Puebla, admitió que su Ayuntamiento tiene personal infiltrado en grupos de activistas feministas.
Tal parece que vulnerar los derechos humanos y la privacidad de organizaciones civiles no es una falta constitucional, sino una práctica aceptable y honorable para controlar a quienes mantienen una postura crítica frente a las instituciones que siguen fallando a la hora de cumplir con sus obligaciones y a quienes se esfuerzan en transformar una sociedad que continúa anquilosada en una cultura clasista, sexista y racista.
Según el portal Poblanerías, durante su comparecencia, el secretario Cruz Lepe declaró que, desde el 8 de marzo de 2022, tres mujeres trabajadoras del Ayuntamiento se ‘unieron’ a colectivas que realizan actividades en la ciudad y que, desde entonces, han monitoreado sus actividades.
Esto, luego de ser cuestionado por la regidora Vanessa Rendón, quien le solicitó diera información de por qué califica a colectivos feministas como “radicales”. Jorge Cruz Lepe respondió que la Segom cuenta con un área de análisis político donde “hay expertos en el tema”; posteriormente, informó de las infiltradas que hay en las colectivas feministas poblanas.
“De hecho tenemos dos o tres personas nuestras, mujeres, dentro de los colectivos desde el 8 de marzo. Ellos están perfectamente bien, digamos, tienen el tacto y el pulso y precisamente han podido entrar en los colectivos o colectivas, como se les llama, en donde te lo permiten. Los colectivos más renuentes a recibir gente, y por lo visto que tienen mayor grado de radicalidad, no han permitido el ingreso. No puede entrar cualquiera”, dijo.
Señaló que desde el 8 de marzo de 2022, cada 15 días, integrantes del ayuntamiento han tenido reuniones de “qué hacer con este movimiento” para evitar que pinten monumentos en las marchas. Añadió que han intentado sostener pláticas con colectivas, pero que no han obtenido respuesta, luego indicó que tendrán una reunión con la activista poblana Olimpia Coral Melo, para fijar posturas.
Espiadas por Sedena, Estado y Municipio
Según la misma nota de Poblanerías, los grupos feministas de Puebla no solo son espiadas por el gobierno municipal, pues a inicios de octubre también se reveló información dentro de Guacamaya Leaks sobre que las activistas poblanas también son espiadas por Sedena, así como por la Fiscalía General del Estado de Puebla y el Gobierno Estatal.
Guacamaya Leaks, reveló que el Ejército de México vigiló a feministas poblanas de una colectiva creada en 2020, argumentando que “afecta los intereses gubernamentales”.
La información personal de las integrantes de la colectiva fue enviada por correo electrónico a Gilberto Higuera Bernal, fiscal de Puebla; la coordinación de la 25 Zona Militar; personal del Consejo Estatal de Coordinación del Sistema Nacional de Seguridad Pública (CECSNP).
Se incluyó la información de los canales por donde se comunican las colectivas feministas, destacando ungrupo de WhatsApp con 42 integrantes y aunque este era privado, así como una cuenta en Facebook, el Ejército pudo conseguir su agenda diaria e investigó a las integrantes.
Con información de La Jornada de Oriente y Poblanerías