Van tres madres buscadoras asesinadas en lo que va del año

El 2022 se está convirtiendo en un año terrorífico para el país, rompiendo records históricos como el asesinato de periodistas y comunicadores. Pero también se está atacando de manera brutal a las madres que buscan a sus hijas e hijos desaparecidos.

El asesinato de la madre buscadora Rosario Rodríguez en el municipio Cruz de Elota, Sinaloa, es el tercer caso registrado en lo que va de 2022 en México, sumado a los asesinatos de Ana Luisa Garduño Juárez, en enero, y de Brenda Jazmín Beltrán Jaime, en julio, señaló la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en México (RNDDHM).

Precisó que con el feminicidio de Rosario, el número de feminicidios perpetrados contra defensoras que luchaban por el derecho a la verdad, justicia y reparación en México durante los últimos 12 años ascendió a 16. Y agregó que tan sólo en 2022, nueve defensoras y mujeres periodistas han sido asesinadas en México por su labor.

La Red exigió a la Fiscalía General del Estado de Sinaloa que inicie una investigación «expedita, integral y con perspectiva de género» en torno al asesinato de la defensora y que garantice las medidas necesarias de reparación y protección para su familia.

Rosario Lilán era madre de Fernando Abixahy Ramírez Rodríguez, desaparecido desde 2019. Luego de celebrar una misa en honor a su hijo, fue secuestrada por un comando armado el pasado 30 de agosto y posteriormente asesinada en el municipio de Elota, Sinaloa, entidad en la que participó en brigadas de búsqueda de desaparecidos durante el mes.

Dos semanas antes de su asesinato, la madre buscadora denunció en un video la inacción de las autoridades para encontrar a su hijo. «Quien se llevó a mi hijo está detenido en San Luis Río Colorado y la Fiscalía me dice que no se puede hacer nada», dijo en la publicación.

Policía Municipal implicada

El caso de Rosario es otro que demuestra que las autoridades y el crimen organizado están coludidas en muchas partes del país, o más que estar coludidos son una y la misma cosa; fiscalías que amenazan a quien denuncia y cuerpos policiales al servicio de los cárteles.

En este sentido Una integrante de un colectivo de búsqueda en Mazatlán, al que Rosario pertenecía, y quien pidió anonimato por temor a represalias, recuerda:“La última vez que salió a búsqueda se le acercó una patrulla de la Policía Municipal con un civil que no era policía para preguntarle ‘Bueno, señora, ¿usted qué tanto busca?’, ella le dijo que solo pedía que le dieran a su hijo”.

“Eso fue lo último, pero antes ya le habían rociado gasolina a su casa para incendiarla, intentaron desaparecer a su otro hijo, en una ocasión le quitaron una camioneta y se la regresaron al siguiente día. Siempre recibió amenazas”, relató una mujer integrante de un colectivo de búsqueda que pidió anonimato por temor a represalias

A continuación el comunicado completo de la RNDDHM:

El pasado martes 30 de agosto, en el marco del Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas, Rosario Lilián Rodríguez Barraza, defensora buscadora  e integrante del Colectivo Corazones sin Justicia, fue secuestrada y asesinada en el municipio Cruz de Elota, Sinaloa.

La defensora fue secuestrada por individuos armados que se desplazaban en una camioneta Suburban blanca y tuvo lugar cerca de las 9 de la noche en la colonia Palos Blancos, tras salir de la misa que organizó para su hijo desaparecido.

Tras los hechos, uno de sus hijos reportó inmediatamente su desaparición llamando al 911, sin obtener respuesta de las autoridades. Cuatro horas después, se encontró el cuerpo de Rosario en la vía pública.

Rosario Lilián Rodríguez buscaba a su hijo, Fernando Abixahy Ramírez Rodríguez, desaparecido el 16 de octubre de 2019. Debido a su labor de búsqueda, la defensora fue víctima de amenazas y agresiones, entre las que se encuentran el rociado con gasolina de su casa para incendiarla, el intento de secuestro a su otro hijo y el robo de su camioneta (la cual fue hallada al día siguiente).

El pasado 11 de junio Rosario grabó un video para el proyecto Hasta Encontrarles en donde señaló que tras la desaparición de su hijo interpuso una denuncia y presentó videos y testigos de la desaparición. El presunto responsable está detenido en San Luis Río Colorado, Sonora, pero la Fiscalía General de Sinaloa le informó que no podía realizar ninguna acción de investigación contra el hombre por estar fuera de su jurisdicción.

Van 16 buscadoras asesinadas desde 2010.

El feminicidio de Rosario por su labor de búsqueda de su hijo no es un hecho aislado y con su asesinato, suman en 2022, tres feminicidios de buscadoras, junto con Ana Luisa Garduño Juárez, quien fue asesinada en enero, y Brenda Jazmín Beltrán Jaime, en julio. Según datos del Registro de Agresiones de la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en México, con el feminicidio de Rosario ascienden a 16 los feminicidios perpetrados contra defensoras que luchaban por el derecho a la verdad, justicia y reparación en México durante los últimos 12 años.

Según datos de este mismo registro, 9 defensoras y mujeres periodistas han sido asesinadas en México por su labor en lo que va de 2022.

Desde la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en México y la IM-Defensoras repudiamos y condenamos el feminicidio de la defensora de derechos humanos Rosario Lilián Rodríguez Barraza.

Exigimos a la Fiscalía General del Estado de Sinaloa lleve a cabo una investigación expedita, integral y con perspectiva de género en torno al asesinato de la defensora y que garantice las medidas necesarias de reparación y protección para su familia.

Asimismo recordamos que es obligación de las autoridades tomar las medidas necesarias para garantizar la protección de todas las personas y colectivos que trabajan por el derecho a la verdad, la justicia y la reparación del daño en el Estado de Sinaloa y en el país.

Finalmente hacemos un llamado a la comunidad internacional a solidarizarse con la familia de Rosario Rodríguez, pronunciándose de inmediato ante este hecho, denunciando y exigiendo justicia.

Con información de la RNDDHM y Desinformémonos