Breve recuento del racismo en Estados Unidos
El racismo es un cáncer existente en todo el mundo, sin embargo toma diferentes formas y tiene distintos niveles de arraigo en cada sociedad. El caso estadounidense es particular, un país que se representa a sí mismo como multicultural, pero que a lo largo de su historia ha practicado distintas formas de racismo que lo ha llevado hasta su configuración actual. Ante el asesinato de George Floyd a manos de la policía de Minneapolis y los disturbios en diversas ciudades de EE UU, vale la pena hacer un recuento de cómo se llegó hasta este punto.
A principios del siglo XVII empezaron a importarse los primeros esclavizados africanos al territorio que más adelante se convertiría en Estados Unidos de América. Cientos de miles de africanos esclavizados y sus descendientes cargaron con el trabajo urbano y rural que permitió su desarrollo económico. Los esclavos no tenían derechos, vivían hacinados y su vida dependía enteramente de su dueño.
Hacia 1863 Abraham Lincoln firmó la abolición de la esclavitud, la liberación fue un proceso gradual y Estados Unidos fue uno de los últimos paises del continente en terminar con el régimen esclavista. Mientras paises como México buscaron pasar de la abolición de la esclavitud a una sociedad con igualdad de derechos, en EEUU comenzaron a publicarse las leyes “Jim Crow”, leyes de segregación racial promulgadas a partir de 1867, apenas 4 años después de la abolición. En ellas se establecía la separación por razas del uso de espacios públicos, transporte, escuelas, baños y restaurantes. Sobra decir que los mejores espacios estaban reservados para la población blanca.
Después de una larga batalla dada por el movimiento por los derechos civiles, cientos de muertos después entre ellos Malcom X y Martin Luther King, logran abolirse en 1965 las leyes de segregación racial y aspirar a la igualdad de derechos. El punto de partida deja mucho qué desear: una enorme desigualdad social, una segregación que tomó forma en ghettos urbanos empobrecidos donde vivía la población afroamericana, escaso acceso a educación y diversos factores similares que no coinciden con la idea de igualdad.
Además de las condiciones económicas, existe un fuerte racismo institucional que criminaliza a la población afroamericana, ejemplo de esto es la tasa de encarcelamiento de hombres negros, la cual es seis veces superior a la de los hombres caucásicos según el informe de Humans Right Watch de 2016. Estas condiciones de vulnerabilidad, generan también que cualquier situación de crisis regional se vea reflejada de forma más grave entre la población afroamericana, como en el caso de las miles de familias arrojadas a la calle al perder sus casas (homeless) donde la tasa de familias afroamericanas es mayor que el resto; o el paso del huracán Katrina por New Orleans en el 2005, donde se reconoció la muerte de alrededor de 1,500 personas pero se habla de una cantidad mucho mayor, por el desdén institucional por prevenir la catástrofe al restar importancia a la población por ser predominantemente afroamericanos.
De entre todos los eventos visibles de abuso cometidos contra afroamericanos, se destacan los de abuso policial y particularmente los asesinatos de afroamericanos a manos de policías en situaciones donde el primero no representaba ningún peligro. El hecho mismo del asesinato o la inacción de la justicia contra el policía asesino, han significado días de protesta pacífica y disturbios. Ese es el caso de Rodney King en 1992, Trayvon Martin en 2012, Eric Garner, Michael Brown y Tamir Rice en 2014, Walter Scott y Freddy Grey en 2015, así como Terence Crutcher en 2016.
Además de la mayor exposición del caso de George Floyd en una sociedad cada vez más comunicada (Will Smith declaró que “el racismo no es pero ahora, solo está siendo filmado”), uno de los motivos para que se den los mayores disturbios vistos en décadas, puede ser la abierta licencia social de Donald Trump a los grupos como el Ku-Kux-Klan para expresarse publicamente y hacer apología del racismo.
A seis días del asesinato de George Floyd, espero que se haga justicia y que la movilización social sirva para caminar hacia la eliminación del racismo.