¿Cuáles son las omisiones y trampas del dictamen para el uso medicinal de la marihuana?

A lo largo de este jueves 8 de diciembre la cámara de Senadores discutió –sin llegar a un acuerdo– la reforma legislativa sobre mariguana medicinal. Aunque el proyecto ya pasó por comisiones, las bancadas parecen no ponerse de acuerdo para su aprobación. Mientras, colectivos de consumidores advierten que el dictamen tiene huecos que siguen permitiendo la criminalización.

Algo de contexto:

El 4 de noviembre del año pasado la Suprema Corte de Justicia de la Nación dio un fallo histórico al conceder un amparo a cuatro personas para hacer uso “lúdico” de la mariguana, su siembra y consumo personal, sin incluir su comercio, suministro o distribución.

Esta acción marcó un precedente para que, ya con este camino abierto, toda aquella persona que desde llevar a cabo la misma acción, pueda hacerlo. Sin embargo, la forma más eficaz y lógica para lograrlo sería empatar las leyes con lo dictado por el órgano máximo de justicia del país.

En sintonía con lo aprobado por la SCJN, de enero a abril de este año el gobierno federal organizó los “Foros del Debate Nacional sobre el Uso de la Marihuana”, en estos meses se llevaron a cabo mesas de discusión con expertos, autoridades y legisladores en diferentes estados de la república.

Con base en lo planteado en estos foros, presidencia envió al Senado de la República una iniciativa de reforma a la Ley General de Salud y al Código Penal Federal. Esta proponía:

-Autorizar el uso de medicamentos elaborados a base de marihuana y/o sus ingredientes activos.

-Autorizar la investigación clínica con fines de registro para productos que contengan marihuana y sus ingredientes activos.

-Que no se considere delito la posesión, para uso personal, de hasta 28 gramos de marihuana, conforme a estándares internacionales.

Esta iniciativa pasó a las comisiones de Salud, Justicia, Gobernación, Seguridad Pública, Derechos Humanos, y de Estudios Legislativos del Senado donde por unanimidad, aprobaron la  parte de la reforma que regula el uso de la marihuana con fines medicinales. Sin embargo desecharon la propuesta de los 28 gramos y la mantuvieron en cinco.

El día de hoy este dictamen pasó para su aprobación a pleno, que es el último filtro para la aprobación de la reforma.  A pesar de que Pablo Escudero Morales, presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, hace unos días aseguró que ya existía un acuerdo entre las bancadas para aprobar el dictamen de comisiones, esto no fue así.

Lo que sí acordaron:

Los grupos parlamentarios del PRI, PAN, PRD y PVEM lograron acordar que se incluya en la mariguana medicinal a los derivados de la cannabis en concentraciones del 1% o menores de THC y que tengan amplios usos industriales, lo que implica que el cáñamo puede ser comercializado, exportado o importado, si cumple los requisitos establecidos en la regulación sanitaria.

La traba legislativa:

El grupo parlamentario del PAN condicionó su voto a que el pleno de la Cámara de Diputados apruebe en sus términos la minuta de la Ley contra la Trata de Personas.

¿Cuál es el riesgo de este dictamen?

Colectivos y organizaciones como el Movimiento Cannábico Mexicano y la Asociación civil México Unido Contra la Delincuencia  (MUCD) han advertido sobre las inconsistencias en el dictamen del senado.

Advierten que el proyecto va en contra del fallo de la SCJN que declaró inconstitucional la prohibición y reconoció el consumo y el cultivo de mariguana como parte del derecho al libre desarrollo de la personalidad.

El movimiento cannábico denunció en un comunicado que esta reforma “se centra en el aspecto medicinal de los usos de la planta, pero con propuestas que tampoco atienden la problemática real de pacientes y familiares que requieren acceso a una terapia al alcance de sus economías. Y es que de acuerdo con la clasificación de productores en Estados Unidos, los medicamentos con un contenido superior del 1% de THC tienen costos de al menos cinco mil dólares. Y una cosa que no contempla esta reforma es la permisión de pacientes de a, por ejemplo, el autocultivo de la planta.

Por su parte MUCD advierte que, por la redacción, el problema más grave del Dictamen radica en la inclusión de la prohibición de la marihuana directamente en el Código Penal. Ya que se está sustrayendo la prohibición primaria del ámbito administrativo y pasándola al ámbito penal, con todo lo que ello implica que es que esta ley está más orientada hacia la punición que a la regulación.

Con información de La Jornada, Excelsior y NYT.