Elecciones en Estados Unidos: Diagnóstico y pronóstico

Estamos a muy poco de conocer quién será el próximo presidente de los Estados Unidos de América. Se trata de una elección sui géneris por el perfil de los contendientes –una mujer, esposa de un expresidente, enfrentada a un magnate racista– así como por la excepcional presencia de México en el discurso público del país vecino. Es una lástima que el gobierno en turno no estuviese a la altura de una oportunidad única para cambiar a nuestro favor, aunque sea en el discurso, las condiciones que definen la relación bilateral. Será increíble para generaciones futuras recordar el papel desastroso que jugó México, por ocurrencia de Luis Videgaray, en el episodio de la visita de Trump a Los Pinos. Siendo Clinton puntera en todas las encuestas, podríamos esperar que la respuesta a la “elección” de Peña por Trump venga por donde más le duele: un dura crítica desde Washington por la crisis de Derechos Humanos que se vive en nuestro país.

LOS DATOS

A unos cuantos días de las elecciones presidenciales en los Estados Unidos, Hillary Clinton parece haber asegurado su lugar en la Casa Blanca. De acuerdo con datos del especialista en elecciones Nate Silver, la candidata a la presidencia por el partido demócrata tiene 81% de probabilidades de ganar las elecciones el próximo 9 de noviembre. Su contrincante, Donald Trump, ha perdido popularidad en las últimas semanas debido a dos errores: los videos en donde se le escuchó hablar de manera sexista sobre las mujeres -respecto a los cuales no se disculpó-, así como por sus declaraciones durante el tercer y último debate, en las que asegura que no aceptará el resultado de las elecciones a menos que él sea el vencedor.

Esta conducta del candidato republicano redujo a 19% las probabilidades de que sea el próximo presidente de los Estados Unidos. Si tomamos en cuenta que para el 26 de septiembre los datos arrojaban un 54% para Clinton y un 45% para Trump, a menos de diez días de las elecciones los pronósticos de que el magnate neoyorquino llegue a la Casa Blanca no le favorecen.

La ventaja de Clinton también se ve reflejada en el índice de encuestas elaborado por el medio norteamericano Real Clear Politics. Haciendo una medición del promedio de las nueve encuestas más importantes en todo los Estados Unidos, Hillary Clinton adelanta a Donald Trump por 2.5 puntos porcentuales. Si tomamos en cuenta que la tendencia en la popularidad del candidato republicano viene a la baja desde principios de octubre, cuando tenía el 45% del voto, parece complicado -aunque no imposible- que pueda revertir las tendencias.

Uno de los hechos clave que juegan a favor de la demócrata es que su popularidad ha crecido en estados donde el partido republicano tiene mayor presencia. A pesar de que Trump continua con una mayoría de votos en lugares como Iowa, Pensylvania, Nevada, Ohio o Winsconsin, Clinton adelanta en las encuestas en estados como Colorado, New Hampshire y Virginia. De acuerdo con información del medio electrónico FiveThirtyEight, en Colorado, por ejemplo, Clinton tiene el 51% de los votos del electorado respecto un 45% de Trump. En New Hampshire, Hillary tiene el 52% ante un 46% de Trump. Por último, en Virginia, la candidata demócrata aventaja a su opositor republicano con una intención del voto de 51% para ella y 46% para él.

Para que un candidato a la presidencia de los Estados Unidos pueda declararse victorioso se requiere de contar con 270 votos del colegio electoral. Hasta el 29 de octubre del presente año, Clinton contaba con 250 votos asegurados ante 126 de su contrincante. Esto posiciona a Clinton como la principal favorita para convertirse en la primera presidenta de los Estados Unidos, al necesitar únicamente 20 votos más para asegurar la victoria. Si tomamos cuenta que varios estados que votaban prioritariamente republicano han inclinado su voto a favor de Hillary, las posibilidades de que Donald Trump son mínimas.

Estos datos han sido tomados un día después de las declaraciones del F.B.I (Federal Bureau of Investigation) que aseguran que tienen aún correos electrónicos de Hillary Clinton por investigar. Esto abre nuevamente el tema de los más de 30 mil correos de la candidata demócrata eliminó de una cuenta privada mientras era Secretaria de Estado. El hecho le ha dado a Trump una pequeña oportunidad de intentar remontar en las encuestas. Sin embargo, mientras el F.B.I no proporcione información contundente de la culpabilidad de Hillary Clinton y con todos los debates presidenciales realizados, parece muy difícil que el candidato republicano pueda sacar provecho a esta noticia.

La Entrevista

“Hay que votar por Clinton sabiendo que el sistema está roto”: Waleed Shaid

“Yo fuí arrestado por mis raíces. Como un musulmán americano, no puedo mantenerme al margen mientras Trump y el Partido Republicano continúan demonizando a mi comunidad e intentando hacer que las personas vivan con miedo hacia mi familia. Ellos dicen que aman a nuestro país. Me pregunto por qué entonces odian a americanos como yo”.

Waleed Shaid es un periodista y activista norteamericano. Actualmente trabaja como Director de Estrategia en Working Families Party, una importante organización política radicada en Pensilvania que se dedica a mejorar las condiciones económicas de los trabajadores en USA. Aunque originalmente apoyó a Bernie Sanders, ha promovido a Hillary Clinton desde que ella asumió la candidatura demócrata: “Votar contra Trump es nuestra obligación histórica”.

La lucha por la candidatura demócrata estuvo llena de fricciones. ¿Cómo fue el paso de apoyar a Sanders a estar con Clinton?

Fue un proceso difícil. Al final, la gran mayoría de jóvenes que apoyaban a Sanders van a votar por Clinton, pero considero que no es un voto sin condiciones: es un hecho que son personas hartas del status quo, que desafortunadamente, Hillary representa.

¿Consideras que a través de los debates Hillary Clinton ha superado su falta de conexión con ese sector?

Creo que el problema es más profundo de lo que parece. Hoy los jóvenes estamos buscando una manera de participar partiendo del principio de que nuestro sistema está roto. Hay un gran vacío. Hillary, los líderes progresistas y las organizaciones políticas necesitan asumir eso. No es un problema que será fácil resolver.

Clinton y los líderes del Partido Demócrata dicen que América ya es maravillosa -en oposición al slogan “Volver a hacer grande a América” de Trump- y yo creo que ambos están equivocados. Nuestro país sólo es maravilloso cuando las personas trabajan juntas para lograrlo, pero aún existen elementos de exclusión presentes en los mecanismos políticos de nuestro sistema que lo impiden.

Waleed en AJ+:

¿A qué mecanismos te refieres?

Hace algunos meses estuve en la cárcel, junto a otros once hombres y mujeres valientes, por hacer una ocupa en la oficina de Paul Ryan -un congresista republicano- exigiendo que repudie a Donald Trump y los cincuenta años de la trampa racista sobre la que han construido su partido. Por ser musulmán me revisaron más larga y agresivamente que a cualquier otra persona. Eso me hizo pensar en esa América que el “Grand Old Party” nos promete. Es por eso que los jóvenes debemos luchar por una nueva idea de Estados Unidos….antes de que sea demasiado tarde.

¿Cómo enfrentas el racismo desde tu posición de joven musulman envuelto en política?

Creo que los republicanos quieren dividir al pueblo estadounidense a través de sus políticas del miedo y el odio, mientras que sus proveedores de fondos multimillonarios son más ricos que nunca. Nadie debería sorprenderse de que un partido construido por racistas fraudulentos y multimillonarios tengan ahora a un multimillonario racista fraudulento como su candidato a presidente. Pero nuestra generación no va a soportar el racismo del Partido Republicano. Mientras ellos se ocupan de hacer polvo a nuestro país, vamos a seguir luchando por una América y una democracia para todos.

Waleed se pronuncia ante la declaración de Trump de que no aceptaría el resultado de las elecciones:

CRÉDITOS

Narrativa: César Alan Ruiz Galicia
Datos: César Suárez Ortíz 
Diseño web: Francisco Trejo Corona
Animación original: Jonathan Gil