El impacto de las redes sociales en la salud mental durante las fiestas decembrinas: cómo manejarlas con bienestar
Las fiestas decembrinas suelen ser retratadas como la época más feliz del año: luces brillantes, reuniones familiares, cenas abundantes y regalos bajo el árbol. Sin embargo, para muchas personas, estas fechas también traen consigo un aumento de ansiedad, estrés y tristeza. ¿El culpable silencioso? Las redes sociales, plataformas que, aunque parecen acercarnos a los demás, a menudo intensifican nuestras inseguridades y emociones negativas durante esta temporada.
Durante las fiestas, las redes sociales se llenan de imágenes cuidadosamente seleccionadas de celebraciones, regalos y momentos familiares aparentemente perfectos. Este fenómeno activa lo que los psicólogos llaman “comparación social ascendente”, donde las personas miden su vida contra las idealizaciones de otros, provocando sentimientos de insuficiencia. Según un estudio publicado en Cyberpsychology, Behavior, and Social Networking, los usuarios que consumen contenido aspiracional durante las fiestas reportan niveles más altos de insatisfacción personal y tristeza.
El problema se agrava porque estas comparaciones son, en su mayoría, irreales. Lo que vemos en plataformas como Instagram o TikTok suele ser una versión editada de la realidad, con filtros que ocultan imperfecciones y narrativas que evitan conflictos. Este contraste puede hacer que los espectadores se sientan desconectados de sus propias experiencias.
La soledad digital en un mundo hiperconectado
Otro aspecto del impacto de las redes sociales es la sensación de soledad que pueden generar. A pesar de que estas plataformas prometen conexión, muchas personas experimentan lo contrario. Durante las fiestas, ver publicaciones de reuniones familiares o de amigos puede recordarle a quienes están lejos de sus seres queridos, o a quienes no tienen redes de apoyo sólidas, lo que aumenta el sentimiento de aislamiento.
Un informe de Journal of Social and Clinical Psychology demostró que el uso excesivo de redes sociales está relacionado con mayores índices de soledad y depresión, especialmente en momentos donde las expectativas sociales son altas, como durante las fiestas decembrinas.
La “presión de la felicidad” y el miedo a perderse algo (FOMO)
La narrativa predominante en redes sociales durante diciembre es que deberías estar feliz, pleno y rodeado de seres queridos. Esta “presión de la felicidad” puede ser asfixiante, especialmente para quienes atraviesan dificultades como duelos, problemas económicos o conflictos familiares. Sumado a esto, el miedo a perderse algo (FOMO, por sus siglas en inglés) se intensifica cuando las personas ven a sus amigos disfrutando de eventos exclusivos, viajes o actividades que no pueden replicar.
El FOMO no solo incrementa la ansiedad, sino que también fomenta un uso compulsivo de redes sociales. Según un estudio de Computers in Human Behavior, las personas con FOMO tienden a dedicar más tiempo a las redes, lo que perpetúa el ciclo de comparación y malestar emocional.
Cómo proteger tu salud mental durante las fiestas decembrinas
Aunque las redes sociales son parte integral de nuestra vida moderna, existen estrategias para minimizar su impacto negativo en la salud mental durante las fiestas:
- Establece límites de tiempo: Utiliza funciones de las aplicaciones o configuraciones de tu teléfono para limitar el tiempo que pasas en redes sociales. Estudios han demostrado que reducir su uso a 30 minutos diarios puede mejorar significativamente el bienestar emocional.
- Consume contenido de manera consciente: Sigue cuentas que te inspiren, eduquen o te hagan sentir bien, y deja de seguir aquellas que generan estrés o inseguridad. Es un acto de autocuidado curar tu feed con intención.
- Desactiva notificaciones: La constante interrupción de las notificaciones puede aumentar la ansiedad. Durante las celebraciones, intenta desactivar las alertas para estar más presente en tus actividades.
- Prioriza interacciones en la vida real: Aunque es tentador conectarte digitalmente, enfócate en construir conexiones auténticas fuera de línea. Organiza una llamada con un amigo o planea una actividad sin pantallas con tus seres queridos.
- Practica gratitud y autocompasión: Reconoce lo bueno en tu vida, sin importar cuán pequeño parezca. Acepta que no necesitas tener una vida “de Instagram” para disfrutar las fiestas.
- Busca apoyo profesional si lo necesitas: Si las redes sociales están afectando gravemente tu salud mental, no dudes en buscar ayuda de un psicólogo o terapeuta.
El impacto de las redes sociales en la salud mental durante las fiestas decembrinas es innegable, pero también manejable. La clave está en recordar que las plataformas digitales no son reflejos fieles de la realidad y que las fiestas no tienen que ser perfectas para ser significativas. Al enfocarte en lo que realmente importa —tu bienestar y tus relaciones auténticas—, puedes disfrutar de esta temporada sin sucumbir a las presiones externas.