“Diablillas de Hondzonot merecen el Premio Nacional del Deporte”

En una comunidad ubicada a 80 kilómetros de Tulum, existe un equipo de mujeres que defiende la cultura Maya a través del deporte, ataviadas con sus trajes originarios las peloteras que componen a las Diablillas de Hondzonot han transformado en muchos aspectos la visión que se tiene del softbol y sobre todo de las mujeres originarias.
“Las mujeres aquí nunca salían a jugar, que no nos hablaban por los maridos, que son personas así que rebeldes y eso y pues decían vamos a ponernos ‘Diablillas’ porque nos dicen que somos malas”.- Fabiola.
La fama y el cariño que se tiene por este equipo ha crecido tanto que ahora, un tweet de la cuenta @tihui que las propone para recibir el Premio Nacional del Deporte ha sido compartido por miles de cuentas.

Sobre las Diablillas se pueden encontrar varias notas de prensa y vídeos que hablan de su historia y los retos que enfrentan para seguir practicando su deporte favorito. Entre ellas, destaca la narrativa del medio MasDeMX, que acierta en apuntar que “Estas mujeres maya-hablantes que, en su mayoría, se dedican a ser amas de casa o bordadoras, jamás imaginaron que jugar sóftbol sería una forma de luchar con contrincantes mucho más agresivos y perjudiciales que los equipos que enfrentaban en la cancha, como el machismo.”

“La resistencia que irradian las Diablillas Mestizas inició con la selección del nombre para su equipo. Enojonas, mandonas y rebeldes eran algunos de los adjetivos con los que calificaban a las 18 integrantes. Y no hay como el sentido del humor para darle la vuelta a prácticas cotidianas, que como muchas otras, esconden de forma sutil (porque los hemos normalizado) distintivos que fomentan las discriminación y desigualdad.” (MasDeMX)

No son las únicas

Pero las Diablillas no son las únicas mujeres que hacen del softbol una forma de resistencia y un espacio de encuentro para el fortalecimiento de las redes de mujeres de origen Maya. Otro equipo que juega con trajes típicos de la región Maya, y que no han tenido tanta difusión como las Diablillas, son las Amazonas de Yaxunah.

Otro ejemplo interesante es el de María Guadalupe Koyoc Ku, conocida en su comunidad como la Maestra Lupita, quien recorre las comunidades mayas del municipio de Felipe Carrillo Puerto para conformar equipos femeniles de softbol.

“Estamos promoviendo y fortaleciendo el softbol en las comunidades indígenas, con el propósito de que haya mayor participación de mujeres, hay poca debido a que se inclinan más a hacer otras cosas”.- Maestra Lupitaita

Sin importar si la iniciativa de otorgar el Premio Nacional del Deporte a las Diablillas trasciende, es importante visibilizar el trabajo de todas estas mujeres deportistas originarias y apoyarlas para difundir su historia y sumarnos a la exigencia de que las autoridades de cada una de sus localidades cubran las necesidades básicas que solicitan para seguir practicando este noble juego.

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Con información de MasDeMX, La Jornada Maya y Medio Tiempo. | Edición del Colectivo Alterius 

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