La maternidad y el tenis: un debate y discriminación.
Serena Williams es probablemente la mejor tenista de todos los tiempos. Hace unos meses, decidió ser mamá y alejarse de las cañas de tenis por un tiempo, su hija nació en septiembre de 2017.
Mientras estuvo en trabajos de parto, una embolia pulmonar, complicó su recuperación, obligó a que fuera una cesárea de emergencia y a someterse a múltiples cirugías, Serena afirmó que “casi muero después de dar a luz a mi hija”.
Serena anunció su embarazo en las redes sociales. Se retiró del tenis por dos años y volvió con múltiples actos de discriminación, en busca de ser la tercera tenista en la historia que es campeona de un Grand Slam, siendo madre, sin duda esta estadística no la llevan en la rama varonil.
En 2018, llegó a al final de Wimbledon y no logró coronarse, frente a Angelique Kerber, quien después de todo lo que había pasado, en la ceremonia de triunfo, declaró:
“Tú eres una inspiración para todos. Es increíble lo que has hechos. Estoy segura que volverás a ganar. Felicidades por volver”
Serena se encuentra a un solo trofeo de igualar los 24 Grand Slams de Court, obtenidos en 1975. Serena reconoce que este Wimbledon significó un reto porque cambió su estilo de juego por uno más conservador, debido a la cesárea y múltiples operaciones. Hay quienes la han criticado por volver al tenis, después de su parto tan complicado; ella afirma:
“Para mí esto supone sobre todo placer y diversión, porque hace menos de un año pasé por muchas cosas”
No solo se trata de las críticas o los rumores, sino de actos estructurales que la discriminan u ofenden, por ejemplo, cuando ella decidió retirarse por maternidad, era la número uno del ranking, volvió a Roland Garros en Francia, y la organización decidió no colocarla como cabeza de serie y mandarla al último lugar del ranking; esto abrió un debate en el mundo del tenis: ¿tienes derecho a una licencia de maternidad siendo tenista? ¿Los tenistas hombres no sufren este tipo de acciones? ¿Es justo que las tenistas que se esforzaron en este periodo de maternidad no suban en el ranking?
Toni Nadal, entrenador de Rafael Nadal afirmó que era una decisión de justa, pero que el debate debe ir más allá:
“En el tenis, como en todas las profesiones, debemos proteger el derecho de cualquier mujer a ser madre si lo desea. Debemos procurar, en la medida de lo posible, no dificultar su regreso a la competición. Y, sin duda, sería muy bueno para la sociedad ver como una mujer puede ser madre y, a la vez, triunfar en el deporte. Lo que no es aceptable, bajo ningún concepto, es permitir que, a diferencia de los hombres, tengan que decidir entre una cosa y la otra.”
Lo mismo ocurrió en Wimbledon, a Serena no le respetaron su lugar número 1 que dejó cuando tomó la licencia de maternidad. En Roland Garros, una lesión la separó de llegar a semifinales, en Wimbledon, Serena perdió la final; su alto nivel y rendimiento es indudable, sin embargo, otro acto de discriminación surgió: una persecución anormal con controles de dopaje.
Serena acusó en su cuenta de Twitter: “Es el momento del día para tomar de manera aleatoria exámenes de drogas y solo tomarlas para Serena. De todas las jugadoras, se ha demostrado que soy a la que más pruebas le hacen. ¿Discriminación? Creo que sí. Al menos mantendré el deporte limpio.”
…and it’s that time of the day to get “randomly” drug tested and only test Serena. Out of all the players it’s been proven I’m the one getting tested the most. Discrimination? I think so. At least I’ll be keeping the sport clean #StayPositive
— Serena Williams (@serenawilliams) July 25, 2018
Después sentenció que está dispuesta a hacer lo necesario para tener un deporte limpio y que se someterá a cualquier prueba y estaba emocionada por ello.
Pareciera que su regreso extraordinario y su embarazo complicado no es considerado como normal y se busca relacionar con el consumo de alguna sustancia. Este es otra mirada del debate de la maternidad, la discriminación y el mundo laboral, esta vez en el deporte blanco. Serena es positiva:
“Ser madre es genial, fantástico, pero tuve un parto complicado. No es ningún secreto que tuve una recuperación dura. Perdí la cuenta de todas las operaciones que tuve… Se convirtieron en una rutina. Fue verdaderamente duro”