La información ¹Ficha elaborada por Leopoldo Maldonado, Artículo 19.

El 31 de julio de 2015 fueron asesinadas cinco personas en un departamento de la céntrica colonia Narvarte, en el Distrito Federal. Entre las víctimas se encuentra el fotoperiodista Rubén Espinosa Becerril, Nadia Vera, Yesenia Quiróz, Olivia Alejandra Negrete y Mile Virginia. Todas ellas presentaron signos de tortura.

La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, ha incurrido en flagrantes violaciones de los derechos de las víctimas de diversas maneras: a través de filtraciones sobre información sensible; falta de una investigación diligente y el tratamiento denigrante a las víctimas indirectas familiares de las personas asesinadas² La PGJDF no ha aplicado a cabalidad el Protocolo de Investigación para la Atención de Delitos cometidos en agravio de las y los periodistas en el ejercicio de esta actividad (en adelante “Protocolo”) emitido por el entonces Procurador el 12 de mayo del dos mil diez, y publicado en la Gaceta Oficial del Distrito Federal el 14 de mayo de dos mil diez..

Los elementos que resultan preocupantes en la investigación son:

a) En lo relativo al asesinato de Rubén Espinosa Becerril no ha intervenido la Agencia Especializada para la Atención de Delitos Cometidos en Agravio de Periodistas, lo que permite afirmar que, desde un principio, no ha investigado la PGJDF los presentes hechos bajo la perspectiva del ataque a la libertad de expresión pese al discurso en contrario hacia la opinión pública³La PGJDF no ha aplicado a cabalidad el Protocolo de Investigación para la Atención de Delitos cometidos en agravio de las y los periodistas en el ejercicio de esta actividad (en adelante “Protocolo”) emitido por el entonces Procurador el 12 de mayo del dos mil diez, y publicado en la Gaceta Oficial del Distrito Federal el 14 de mayo de dos mil diez..

b) Se rompió la cadena de custodia, puesto que en la investigación no se fijaron fotográficamente ni se dio fe de todos los indicios en la primera inspección ministerial realzada el 31 de julio del presente año. En ese sentido, fue hasta el 2 de agosto que personal ministerial encontró diversos indicios fundamentales para soportar la hipótesis oficial tales como documentos que vinculan a Mile Virginia con el vehículo Mustang, teléfonos, computadoras, bolsas con drogas químicas y memorias USB. El día de los hechos -31 de julio- el personal ministerial no dio fe de tales indicios, lo que genera incertidumbre de que éstos hayan sido introducidos con posterioridad y que patentiza la falta de resguardo y preservación del lugar de los hechos.

c) No se ha podido determinar con la mayor exactitud posible la secuencia en la que ocurrieron los hechos dentro del departamento (ampliar dictamen de mecánica de hechos), es decir, no sabemos que pasó adentro.

d) No se profundizado en la línea de investigación relacionada con los antecedentes de amenazas en contra de Nadia y Rubén (más allá de las declaraciones de cuatro funcionarios de Veracruz), ingadando sobre su activismo y periodismo crítico respectivamente y en la existencia de actos de hostigamiento y acoso contra integrantes de AVC Noticias de Veracruz antes y después del multihomicidio.

e) Ya se obtuvo la sábana de llamadas de aparatos telefónicos sustraídos del lugar, incluidos los de Rubén, Nadia y Mile, pero están en posesión de la Jefatura de Policía de investigación. De hecho ya obran unos informes con el análisis de redes técnicas sobre el número de Rubén, y uno de los dos celulares de Nadia.

Hay una negativa por parte del MP para esclarecer el móvil del multihomicidio

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f) Hay una negativa por parte del MP para esclarecer el móvil del multihomicidio, así como la posible participación material e intelectual de más sujetos, toda vez que existen indicios que apuntan a que no sólo participaron los tres sujetos que desde un principio ha señalado la Procuraduría, sino que se encuentran implicadas más personas, y la importancia de determinar no sólo quién participó materialmente en los hechos, sino indagar también posibles autores intelectuales. Tales indicios son:

• Grupos genéticos con cromosomas XY –masculino- encontrados en objetos usados para herir y estrangular a las víctimas que no corresponden a Rubén ni a los tres detenidos.
  
• Intensa actividad de llamadas entrantes al Nextel de uno de los presuntos responsables Abraham Torres Tranquilino antes, durante y después de los asesinatos. Sobre estos indicios no se ha querido profundizar en cuanto a la confirmación o descarte de que las llamadas estaban vinculadas con el crimen. Llama la atención que recibieron varias llamadas de Chihuahua minutos previos y posteriores a entrar al departamento de Luz Saviñón en la Narvarte.
  
• La camioneta Suburban en la que se desplazaron los presuntos responsables fue encontrada en Cuautitlán Izcalli. En ella se ubicó una tarjeta de circulación a nombre de una cuarta persona sin que a la fecha se haya confirmado o descartado su participación.
  
• Abraham Torres Tranquilino, hoy bajo proceso, señaló en una ampliación de declaración ante el MP que otras dos personas los acompañaron a Daniel y Omar (también procesados) al departamento de la Narvarte. LA PGJDF ha decidido desestimar tal afirmación a priori, e insiste en la tesis de los tres victimarios. Mientras que se ha tomado como verdad absoluta la misma declaración en lo que respecta con el supuesto tráfico de drogas a través de maletas recogidas en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México por parte de Mile Virginia, situación que ya las autoridades federales han descartado al señalar que no tienen registros documentales y videográficos de ella.

El amparo ganado por las víctimas en abril pasado, fue cumplido de manera insatisfactoria. Dicho amparo derivó de la 55 peticiones realizadas por la coadyuvancia el 10 de septiembre de 2015. Hasta la fecha, solamente se ha avanzado en 16 de esas peticiones, lo que equivale al 29% de avance. Sobre el resto de las 39 diligencias, el MP se niega a realizarlas. El argumento de la PGJ es que no tienen la obligación legal de esclarecer el móvil -es decir, no tienen el deber de garantizar el derecho a la verdad- y que ya fueron consignadas tres personas, lo que a su juicio es suficiente.

Filtraciones

En el caso de Rubén Espinosa, Nadia Vera, Yesenia Quiroz, Olivia Alejandra Negrete y Mile Virginia, han sido innumerables las filtraciones que se han dado de la investigación. Al grado que actualmente en la red y en diversos medios de comunicación circulan las fotos de los cadáveres, los resultados de química realizados a los cuerpos, información personal de las víctimas, supuestas hipótesis sobre la ejecución de las cinco personas fallecidas y la declaración del hoy probable responsable Daniel Pacheco Gutiérrez.  Por si fuera poco, el 01 de agosto, mientras una familiar de Rubén reconocía formalmente el cuerpo del periodista, existía información en medios de comunicación que ya hacía pública su muerte. De esa manera se enteraron el resto de los familiares del fotoperiodista.

De esta manera se han causado daños psíquicos y morales a los familiares de las víctimas debido a la intención de criminalizar y estigmatizar a las personas que fueron asesinadas. Dichas fugas de datos sensibles, violentan al derecho a la privacidad de las víctimas y sus familiares y pueden causar un daño real, demostrable e identificable a la persecución de los delitos.

Incluso algunos medios de comunicación han señalado expresamente que “han tenido acceso al expediente” de averiguación previa⁴ “PGJDF: Dos víctimas de la Narvarte dieron positivo en el consumo de droga”, nota publicada el 12 de agosto de 2015, en el portal web de Noticieros Televisa, donde se refiere lo siguiente: “Noticieros Televisa tuvo acceso al expediente de investigación que elaboró la Fiscalía de Homicidios de la Procuraduría General de Justicia del DF en el que se conocen más detalles sobre cómo habría ocurrido el multihomicidio de la Colonia Narvarte, en la Ciudad de México. Según el expediente, la Procuraduría tiene acreditado: …” “PGJDF: Víctimas de la Narvarte fueron atadas de pies y manos”, nota publicada el 14 de agosto de 2015 en el portal web de Noticieros Televisa, donde se refiere lo siguiente: “En el expediente de investigación del multihomicidio de la Colonia Narvarte, al que Noticieros Televisa tuvo acceso, se detalla la forma en que ocurrieron los hechos”. Y en seguida lleva a cabo una descripción de la mecánica de hechos según los dictámenes periciales que constan en la averiguación previa.

“Hallaron drogas, pero sin violencia sexual en caso Narvarte”, nota publicada el 14 de agosto de 2015 en el portal web del Diario Cambio, donde comienza refiriendo lo siguiente: “La marihuana hallada en la escena del crimen es de la variedad conocida como Cola de Borrego, de buena calidad, mientras que los ‘chochos’ son drogas sintéticas, revelaron fuentes confidenciales”. Resalta que “los resultados de los estudios de laboratorio aplicados a los cadáveres de las víctimas indican que Nadia Vera Pérez y Rubén Espinosa Becerril dieron positivo por consumo de alcohol y droga”.

“Rubén Espinosa, positivo en mariguana y cocaína”, nota publicada el 14 de agosto en el Diario La Razón, donde expresamente se refiere lo siguiente: “La Razón cuenta con copias del expediente del caso, donde se detalla el hallazgo que hicieron los expertos de la Dirección General de Servicios Periciales, al mando de Rodolfo Rojo Urquieta. En el mismo expediente FBJ/BJ-1/T2/04379/15-07 de la Fiscalía Central de Homicidios, se explica que las cuatro mujeres y el fotógrafo asesinados, fueron sometidos a una serie de análisis toxicológicos”. Además, publica documentos que forman parte del expediente de averiguación previa, relativos a las pruebas toxicológicas practicadas a las víctimas.. Lo anterior, a pesar de las múltiples peticiones a la PGJDF por parte de las víctimas para que cesen las filtraciones de la investigación a los medios de comunicación. También se han soslayado las medidas precautorias dictadas por la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal para garantizar el resguardo de la información.

La investigación iniciada en la Fiscalía de Servidores Públicos supuestamente arrojó como resultado la imputación de un servidor público de la PGJDF, tal como lo dio a conocer el procurador Rodolfo Ríos Garza⁵ “Consignan a funcionario por filtraciones en caso Narvarte”, nota publicada el 10 de diciembre de 2015 por Excélsior. . En este sentido, no establece la Procuraduría la relación entre la información consultada por el comandante de la policía de investigación y la publicada en los medios. Según obra en el expediente, este policía únicamente consultó información sobre el Mustang rojo que era propiedad de Mile Virginia.

Por lo anterior, las hermanas de Rubén interpusieron un amparo. Después de un largo proceso de litigio en tribunales federales, el Juzgado Noveno de Distrito de Amparo en Materia Penal, determinó el 8 d ejunio de 2016 que el Procurador, la Directora de Comunicación Social y el Agente del Ministerio Público investigador sí tienen la responsabilidad de resguardar la información, y correlativamente, tienen responsabilidad legal respecto a su filtración.

Derivado de un análisis de todo el expediente de investigación, el tribunal señaló que quedaba plenamente demostrado que la información publicada en varios medios de comunicación se encontraba contenida en la indagatoria. Ello, determinó la Jueza, generó revictimización y estigmatización.

 

#1AñoSinJu5ticia

A un año de los hechos, cientos de activistas y periodistas se dieron cita en la Ciudad de México, Xalapa y Guadalajara, con el objetivo de exigir justicia para las víctimas del multihomicidio. Afuera de los departamentos de Luz Saviñón 1909, lugar donde ocurrieron los hechos, se colocó una placa en memoria de Rubén, Nadia, Alejandra, Mile y Jesenia.

Manifestación en Luz Saviñón 1909 | Fotos: Alexandira Sevilla

En entrevista para Tercera Vía, Alma Espinosa, hermana de Rubén, hizo un llamado a las autoridades para que se aclaren los hechos y se castigue a los culpables: “Exigimos justicia para que el caso de la Narvarte no quede impune”.

En su experiencia, las autoridades de la Ciudad de México han sido más un obstáculo que un aliado. “No ha existido mucho apoyo de su parte. Al principio se hacían reuniones, pero se quedaban en eso. No han logrado hacer una investigación rigurosa, que saque a la luz lo que pasó esa noche, mostrando los videos completos. El apoyo que hemos tenido en realidad ha venido por parte de organizaciones como Artículo 19, fotorreporteros, Colectivo Voz Alterna de Xalapa, amigos y colegas de Rubén, entre otros”, explicó.

A lo largo de estos meses, ellxs han procurado incansablemente que la investigación se realice a fondo: “Hemos sugerido que se hagan peritajes externos, por si las autoridades no pueden hacer las indagaciones adecuadas, pero no lo han permitido. Saben que hay inconsistencias graves en su versión, y aún así, no han querido retomar las líneas de investigación que apuntan a las amenazas sufridas por Rubén y Nadia en Veracruz, vinculadas al trabajo periodístico de mi hermano y al activismo de Nadia. Quizá esperan que nos cansemos. Pero seguimos de pie y lo estaremos los años que sean necesarios”.

Por todo lo anterior, Espinosa hizo un llamado para que se tomen cartas en el asunto: “Exigimos al presidente Enrique Peña Nieto, al Jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, así como al Procurador Rodolfo Ríos, que cumplan su palabra y se llegue en este caso “hasta las últimas consecuencias”. Queremos una investigación exahustiva que nos permita acceder a la verdad. A un año, no olvidamos, no perdonamos”, concluyó.

Por su parte, Leopoldo Maldonado, abogado de Rubén, declaró: “Hay una negativa sistemática por parte de la Procuraduría a desahogar ciertas diligencias, que están enfoncadas a esclarecer el móvil del multihomicidio y a agotar la línea de investigación relacionada con el periodismo de Rubén y el activismo de Nadia. En concreto, a las amenazas y el hostigamiento que padecieron en Veracruz, y que al final los orilló a desplazarse a la Ciudad de México”.

Además, criticó la estrategia de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal en el caso, que consistió en criminalizar a las víctimas: “Lo que la Procuraduría ha hecho es utilizar un mecanismo ilegal, irregular y violatorio de derechos humanos, que son las filtraciones, para construir una narrativa que va dirigida a generar la idea de que el crimen se debe a un tema de sexoservicio, de narcomenudeo o robo -esta última versión fue la más difundida en los días posteriores a los hechos-. Aunque no lo ha sostenido oficialmente, la Procuraduría ha querido inocular su versión, haciendo filtraciones a ciertos medios de comunicación, con datos que son muy sensibles, como dictámenes toxicológicos y fotografías de los cuerpos. Por eso en Artículo 19 activamos un juicio de amaparo, gracias al cual, después de muchos meses, una jueza determinó que se había revictimizado a las familias, y confirmó, a partir de un análisis publicado con la información que existe en el expediente de averiguación, que esas filtraciones existieron”.

 

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Por todo lo anterior, señala Maldonado: “Tenemos dos conclusiones: por un lado, se trata de una indagación deficiente, que abre muchas interrogantes en cuanto a las líneas de investigación, el móvil del crimen y en lo relacionado a la participación de más personas en los hechos, pues hay huellas en la escena que no corresponden a las personas consignadas. En segundo lugar, es un hecho que la PGJDF ha querido desprestigiar y criminalizar a las víctimas, abriendo la puerta a la justificación del crimen. Nos queda claro que la Procuraduría y el Gobierno de la Ciudad de México están obstaculizando el acceso a la verdad y a la justicia que solicitan las víctimas”.  

Posdata

Andres Piña, asistente al acto de protesta, hizó hincapié en las razones por las que es necesario salir a las calles por hechos como los de la Narvarte:

“Es importante rescatar este tipo de eventos para que no pasemos por alto las injusticias que han ocurrido, no sólo durante el régimen de EPN, sino también con Mancera en la Ciudad de México. Estos espacios permiten crear una narrativa contrapuesta al discurso oficial, que pretende desaparecer lo ocurrido”.

Para Piña, además de la denuncia de los hechos, es posible crear un punto de encuentro en estos actos: “Yo asistí porque me conmueve la injusticia. Pero creo que estos espacios además sirven para articular. Quizá en otros momentos eso se dio con base en planes de acción, pero ahora hay que hacerlo bajo esta narrativa, que aunque duele, permite alzar la voz”.

CRÉDITOS

Narrativa: César Alan Ruiz Galicia
Diseño Web: Francisco Trejo Corona
Fotografías: Alexandria Sevilla
Ilustración original: Jonathan Gil