Moto Waganari y la escultura cuántica

Así como el arte de la pintura se transformó desde la invención de la cámara, el arte escultórico ha expandido sus posibilidades desde la irrupción de la impresión en 3D. Un ejemplo de esto es el trabajo del artista alemán Moto Waganari, que busca realizar piezas que contengan una carga sólida y a la vez etérea e intangible.

La fragmentación de los cuerpos, reducidos a sus bases geométricas, y su interacción con la luz genera una propuesta artística que va más allá de las capacidades técnicas de la máquinas que las producen. Sus piezas en movimiento se traducen en expresiones n-dimensionales y así expande nuestra relación con lo corpóreo.

Pueden ver más sobre su trabajo en su página oficial