El mejor comercial sobre violencia de género

La mayoría de las personas pensamos que el abuso sexual no es para nada gracioso y estamos en lo correcto, pero de vez en cuando se puede ironizar con lo idiota que suena alguien diciendo que estos temas no son muy importantes, obteniendo incluso un resultado espectacular.

College of Humor, una compañía de entretenimiento en internet, lo hizo. El video salió en sintonía con la campaña del gobierno estadounidense “It’s On Us”, que busca crear conciencia sobre los ataques sexuales. Sus estadísticas dicen que una de cada cinco chicas habrá sufrido de algún tipo de ataque sexual antes de terminar la universidad.

En el caso mexicano las cifras son mucho más alarmantes. Según datos de la ONU, en México mueren en promedio siete mujeres al día por homicidio y con frecuencia estos casos no se investigan como deberían. La impunidad es una palabra dolorosa y frecuente en este país. De acuerdo con el Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF) de 158 muertes en el DF en 2014, la Fiscalía tan solo ha investigado como feminicidios 31 de los casos.

Las entidades donde se han registrado más feminicidios son Guerrero, Morelos, Oaxaca, Puebla, Veracruz, Chihuahua, Sinaloa, Guanajuato, Distrito Federal y el Estado de México. Estos crímenes nos colocan en el puesto 16 de feminicidios a nivel mundial.

Es importante crear conciencia sobre la violencia de género de todas las maneras posibles, sobre todo en un país en el que normalizamos en extremo todo tipo de violencia. El machismo en México grita, pero también se camuflajea en formas sutiles y se esconde hasta en los lugares más inesperados.

El video de College of Humor comienza en una reunión de chicos viendo la televisión. Cuando uno de ellos intenta ir al baño se da cuenta que hay un oso dentro, reclama al dueño de la casa y comienzan a discutir.

—Solo es un oso grande y hambriento. Sólo pretende que no está ahí.

—¿¡Y entonces se va a ir!?, ¿¡de qué hablas!?

—No, no creo que se vaya a ningún lado, pero no sé que hacer con él. Así que solo lo ignoro.

—Entonces no es peligroso, ¿verdad?

—Mmm… define peligroso. Es un oso. Igual no va a comernos a todos. Solo se come como a una de cada cinco personas.

—¿Una de cinco?

—Dije que solo una de cada cinco, estamos bien.

—Eso es un montón. Eso significa que va a comerse a uno de nosotros.

—¡Estadísticamente!, pero no significa que a uno de nosotros. Significa que solo una de cada cinco personas.

—¿¡Por qué no haces algo al respecto!?

—¿¡Qué quieres que haga!? Ya conocen el dicho “un oso va a ser un oso”.

—¡Eso no es un dicho!

—Un oso va a ser un oso.

—No puedes decir eso, no cuando va a atacar al 20% de la gente que va a venir a tu casa.

—¿20%? ¡Pfff! Dije uno de cada cinco.

—Sí, eso es el 20%.

—No, no lo es, nerd de las matemáticas.

—Te tienes que deshacer de esta cosa.

—O al menos avísanos que hay un oso en el baño. ¡Nos tenemos que cuidar entre nosotros! ¿Qué estas haciendo?

—Oye, lo que pase entre ustedes y el oso no es mi problema.

—¿Cómo que no es tu problema? El oso va a atacar a una de cada cinco personas .

—Están exagerando, el oso no se va a comer a todos nosotros. No va a comerse ni a un cuarto de nosotros.

—¡Ninguno debería morir! ¡Nos afecta a todos, idiota! ¡Uno de cinco!

—¡Estamos bien, estamos bien!. ¡La mayoría estamos bien y no quiero lidiar con este problema!.