¿Qué tipo de valores tienen los mexicanos?

Con la visita del Papa Francisco al continente Americano, vale la pena preguntarse ¿cómo están conformados los valores en México? Esta pregunta es importante ya que los valores o creencias moldean la conducta de los miembros de una sociedad. Por ejemplo, no es de extrañar que en los países cuya religión predominante vea la homosexualidad como una degeneración del ser humano, la discriminación hacia este sector sea grande. De la misma forma si una sociedad reproduce valores que repriman el empoderamiento de las mujeres, los niveles de violencia y maltrato hacia ellas será alto. En cambio, si un país promueve valores como la tolerancia, la confianza y el respeto posiblemente cuenten con mayores niveles de desarrollo y prosperidad social.

De acuerdo con el World Value Survey existen cuatro tipos de valores en las sociedades:
Del otro lado, los valores seculares son aquellos identificados con un desapego a la religión, a la autoridad y a los valores familiares. Las sociedades que practican estos valores tienden a ser más tolerantes hacia la el aborto, el divorcio y la eutanasia. Al mismo tiempo, los valores de expresión personal son aquellos que dan prioridad a cosas como la protección ambiental, tolerancia a los migrantes, participación en decisiones políticas, apoyan la equidad de género y tienen altos niveles de tolerancia hacia la diversidad sexual.Los valores tradicionales están representados por la importancia que la gente le da a la religión, a la fortaleza en las relaciones padres-hijos y el respeto a la autoridad y a los valores familiares tradicionales. Las sociedades que adoptan estos valores normalmente se encuentran en contra del aborto, la diversidad sexual, la eutanasia, el divorcio y son también altamente patriotas o nacionalistas. Los valores de supervivencia se centran en la seguridad económica y física de las personas y está vinculados a bajos niveles de tolerancia y confianza hacia los demás.

No es de extrañar que los países modernos y democráticos son quienes practican valores seculares y de expresión personal. Alto crecimiento económico, tolerancia a la diversidad, privilegio a la innovación, altos niveles de desarrollo humano, Estado de derecho, bajos niveles de violencia y corrupción etc., son solo algunas de las ventajas vinculadas a los valores seculares y de expresión personal. En cambio, los países que privilegian valores tradicionales y de supervivencia tienden a ser sociedades cerradas, intolerantes, poco democráticas y con bajos niveles de desarrollo humano.

De acuerdo con los estudios del World Value Survey, México ha presentado un cambio importante principalmente en los valores de expresión personal siendo el segundo país Lationamericano que más práctica este tipo de valores. Sin embargo, si tomamos como referencia los valores tradicionales, nuestro país se encuentra muy lejos de países que practican los valores secular-racionales como Uruguay, Suecia, Japón, Corea del Sur, etc.  Solo países como Colombia, Venezuela, Puerto Rico y El Salvador se encuentran por debajo de México en el apego de valores tradicionales.

Fuente: World Values Survey 2008

A pesar del avance que México ha tenido en los valores de expresión personal, las crisis económicas y de seguridad de los últimos años seguramente puedan revertir este desarrollo. De acuerdo con los últimos informes del Latinobarometro, para la mayoría de los mexicanos los principales problemas del país son la inseguridad y la economía. Por lo tanto, el mal manejo del gobierno en ambos aspectos podría tener repercusiones importantes en el cambio de los valores de los mexicanos afecta el proceso de modernización social en el país.

Al mismo tiempo, la baja calidad de nuestra democracia desde los últimos 15 años podría ayudar a responder la interrogante sobre el fuerte apego de los mexicanos hacia los valores tradicionales. El respeto a las autoridades y la baja intención de participar en asuntos públicos ha sido mantenida por la deficiente democracia incapaz de generar espacios de participación para la ciudadanía. Al mismo tiempo, la impunidad y prepotencia de nuestros gobernantes dan la imagen de un poder omnipotente incapaz de cambiar, generando una relación de dominación-obediencia entre gobernantes y ciudadanos.

Si bien es difícil explicar si los valores son quienes moldean las instituciones del Estado o son estás últimas quienes cambian la conducta de las personas, no puede negarse que México se encuentra en el borde entre el cambio y la estabilidad o la modernidad y lo antiguo. Está ambivalencia o dualidad cultural de nuestro país al parecer tiene repercusiones importantes en nuestro desarrollo como sociedad. Es necesario que se tomen en cuenta las conductas de las personas en México para poder modificarlas y encaminarlas hacia valores que privilegien la tolerancia, la democracia, la equidad y el desarrollo.