Lula gana la presidencia en un Brasil dividido
En la segunda vuelta de las elecciones brasileñas, Luis Inácio Lula da Silva tomó ventaja con casi la totalidad de los votos contados en una cerradísima elección.
Es un Brasil dividido entre los simpatizante de Bolsonaro, que en su momento se le vio como un Trump sudamericano, y Lula, en un espectacular regreso que años atrás lo vio desacreditado y en prisión.
Leemos en El Diario AR:
“Intentaron enterrarme vivo y aquí estoy”, dijo.
En el estrado donde Lula apareció frente estaban sus aliados conquistados para el balotaje, y al lado de su vicepresidente Geraldo Alckmin. “Nosotros enfrentamos la maquina que buscó impedir que ganáramos” declaró. Y luego añadió: “Esta es la victoria de un inmenso movimiento democrático que se formó por encima de los partidos. El pueblo brasileño demostró hoy que quiere vivir bien, con empleo y salario justo, con salud y educación, y políticas públicas de calidad”.
Como contexo, la misma ola que enterró a la izquierda brasileña por más de una década también abarcó a su sucesora elegida a mano: Dilma Roussef, quien tomó el cargo de presidenta democráticamente electa en 2011 y destuituida por juicio político en 2016.
La gestión de ambos (Dilma y Lula) quedó marcada por escándalos relacionados a corrupción en Petrobras, hechos que fueron dramatizados en la serie ‘El Mecanismo’ de Netflix.
El Mecanismo nos pone a pensar como sería una serie sobre La Estafa Maestra
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Sin embargo, ambos (Dilma y Lula) fueron reinvindicados de manera legal.
El sabor de estos escándalos generó el clima perfecto para la desconfianza en las izquierdas y el ascenso de Bolsonaro.
Ahora, la balanza se ha volteado pero queda un Brasil dividido.
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