Una más de la “rifa” del avión presidencial: reportaron más boletos vendidos y se ¿pierden? 519 millones
Una de las principales promesas de campaña de campaña y al inicio del sexenio del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, fue la venta del avión presidencial.
Después de varios intentos que no dieron resultado en una campaña más publicitaria que operativa, se decidió que la Lotería Nacional hiciera un sorteo llamado “sorteo especial 235”, en el cual se rifó el equivalente al valor del dicha aeronave.
Este se llevó a cabo el 15 de septiembre de 2020, previo al cual se firmó un convenio con el Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado (INDEP) por 2 mil millones de pesos, con el objetivo que se cumplieran con los compromisos adquiridos por el concurso.
Se informó que para este sorteo especial se vendieron 4 685 800 billetes, un 78% de lo que se puso en circulación. De estos se obtuvieron ingresos por 2 342 millones de pesos, de acuerdo al informe final dado por el director de Lotería Nacional, Ernesto Prieto.
No obstante, la Auditoría Superior de la Federación ha entregado datos que discrepan con esta información. En su informe final de la cuenta pública 2020, se publica que en el sorteo especial 235 se vendieron en realidad 3 647 353 billetes, correspondientes al 60.8% del total emitido. De estos se obtuvieron ingresos por 1 823 millones de pesos, mientras que se entregaron 62 premios de 20 millones cada uno. El restante, correspondiente a 264 millones se entregó a la Tesorería de la Federación.
La ASF ordenó la devolución de los 2 mil millones correspondientes al convenio con el INDEP, pues encontró que el dinero recaudado por la venta de boletos fue suficiente para financiar los premios. No obstante, es importante señalar que existe una diferencia entre las cifras de boletos vendidos reportados en un inicio por LOTENAL y lo que finalmente publicó la ASF.
Esta discrepancia es equivalente a 519 millones de pesos, los cuales no se han aclarado. Otra irregularidad se encontró en una transferencia autorizada por el INDEP al Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI) por 500 millones de pesos para adquirir boletos del mencionado sorteo.
La ASF ordenó al INDEP averiguar cual fue el destino final de ese dinero, así como el proceso para entregarlo, pues no se encontró en la revisión que hizo de las cuentas de estos institutos después de observar transferencias, adecuaciones presupuestarias y convenios.