Estados Unidos y Japón realizan la primera pelea real de robots gigantes
Dos empresas tecnológicas: la estadounidense Megabots Inc y la japonesa Suidobashi, se han enfrentado para probar su hegemonía en el primer duelo de la historia con androides gigantes pilotados por humanos. Estados Unidos se impuso a Japón en una pelea bastante aburrida.
Haciendo gala de una habilidad equiparable a las cualidades boxísticas del legendario Jorge Kahwagi, los mega robots, que tomando el modelo Canelo Álvarez no fueron provistos de ningún tipo de inteligencia artificial, sino que son controlados mecánicamente por sus creadores, nos regalaron acciones tan burdas como el segundo asalto que duró tan sólo 20 segundos: el tiempo que tardó el japonés en derribar a su oponente.
El enfrentamiento tuvo lugar en septiembre y se difundió en streaming el pasado 17 de octubre en una plataforma televisada de pago. El evento se publicó después en redes sociales y ahora ya está disponible en youtube.
Aún con lo burdo de este primer espectáculo, el evento abre un nuevo modelo de negocios en el entretenimiento, basado en el imaginario que durante décadas se ha gestado desde la industria cultural que nos legaron productos televisivos como los Transformers.
Es de hecho este imaginario, el que hace parecer soso un despliegue tecnológico que en realidad es sumamente interesante. Gui Cavalcanti y Matt Oehrlein, cofundadores de la startup californiana Megabots, fueron los encargados del espectáculo. En el primer asalto escogieron el robot MK II para confrontar al Kuratas de la empresa nipona, dos robots de altura y peso similar. La lucha solo duró 20 segundos: el tiempo que tardó el japonés en derribar con un gancho metálico de izquierdas a su oponente.
Después, al más puro estilo de la zaga Mazinger Z, los estadounidenses presentaron a su más reciente creación el “Eagle Prime” (un robot de 2,5 millones de dólares que fue financiado en parte gracias a una campaña de crowfunding). Un coloso equipado con un motor de 430 caballos de potencia y un peso de doce toneladas. Las mejoras con respecto a su antecesor —con hasta ocho programas diferentes de movimientos corporales (de ahí lo del Canelo)— atacó la armadura defensiva de su adversario, pero la pelea quedó en tablas al permanecer los androides atascados, sin poder moverse (de ahí lo de Kahwagi).
La tercera ronda dio como vencedor a Estados Unidos. Su rival se defendió con varias salvas de bolas de metal. El Eagle Prime, armado esta vez con una sierra dentada, le obligó a retroceder. Inutilizado el brazo derecho del androide japonés, los estadounidenses acabaron por destrozar parte de su armazón, dando por terminado el duelo. Ahora, China también aspira a entrar en el incipiente club de combate de la robótica de masas que según sus creadores, “en una década, se situará entre los tres deportes más lucrativos en términos de audiencia, ingresos y marketing”.
Con información de El País.