El 53% de los capitalinos rechazan el reglamento de tránsito de la CDMX.

El pasado 15 de diciembre entró en vigor el nuevo reglamento de tránsito de la hoy Ciudad de México. Una de las características principales de este reglamento fue el aumento de las multas de tránsito en un 15%. Algunas de las nuevas infracciones que ahora son sancionadas en la ciudad son el rebasar la velocidad de 80 km por hora, insultar a los agentes de tránsito, utilizar la bocina en exceso, entre otras. Uno de los principales argumentos utilizados por el gobierno de Miguel Ángel Mancera para la aplicación del reglamento es el de disminuir los accidentes de tránsito y salvar vidas en la CDMX.

Los ciudadanos de la capital, sin embargo, consideran que estas nuevas infracciones lo único que buscan es aumentar el dinero de las arcas del gobierno de la Ciudad de México. De acuerdo con un reciente estudio de la casa encuestadora Parametría, el 53% de las personas con carro en la capital del país considera que el nuevo reglamento de tránsito no busca proteger al peatón sino recaudar más dinero.

Este sentimiento de rechazo hacia las nuevas infracciones no se da únicamente en propietarios de automóviles sino también en los peatones. Para el 58% de las personas sin automóvil el reglamento no busca protegerlos sino generar ingresos para el gobierno de la CDMX. Las personas que coinciden con el gobierno capitalino en que el reglamento ayudará a salvar vidas y reducir accidentes sólo representa al 27% de la población de la ciudad.

El problema de legitimidad del nuevo reglamento es aún mayor. No solamente gran parte de la población no cree que las nuevas infracciones ayuden a reducir accidentes sino que el 53% de la población está totalmente en desacuerdo con  el reglamento. Solamente un pequeño 19% de la población capitalina está a favor de las nuevas disposiciones de tránsito de la CDMX.