Reglamento víal: más corrupción, más recursos y menos resultados.
El día de hoy entre en vigor el nuevo reglamento vial de la Ciudad de México. Esta nueva reglamentación busca poner orden a una ciudad que día con día se ve inmersa en un caos vial poco visto no solamente en México sino en el mundo entero. Sin embargo, este reglamento se suma a la larga lista de reglas que han intentado- sin éxito – reducir el congestionamiento vial que sufren millones de personas día a día en el Distrito Federal. ¿Si los reglamentos no han logrado mejorar las vialidades de la ciudad, por qué el gobierno de Miguel Ángel Mancera está tan ansioso de aplicar el nuevo reglamento?
Uno de los principales beneficios de los reglamentos viales para el gobierno del Distrito Federal es la gran cantidad de recursos que genera . De acuerdo con una investigación realizada por el diario Milenio, anualmente la capital del país recauda alrededor de 420 millones de pesos anuales. Este gasto se divide entre los más de 5 millones de conductores que han sido sancionados por violar el reglamento vial desde la administración de Ebrard. Si dividimos todas las infracciones viales castigadas por la autoridad entre los días del año, el resultado es de 5 mil infracciones viales cometidas cada hora. El dinero recaudado anualmente por los agentes de tránsito es mayor que el presupuesto de instituciones como la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal o el Tribunal Electoral.
El aumento de infracciones viales ha incrementado a lo largo de los años en la capital del país. Durante el último año de la administración de Andrés Manuel López Obrador se recaudaron 65 millones de pesos en multas. En el gobierno de Marcelo Ebrard esta cifra subió a los 700 millones. Desde el inicio de la administración de Miguel Ángel Mancera, el dinero recaudado por infracciones viales es de 114 millones de pesos. Desafortunadamente, esta mayor aplicación de la ley no se ha logrado traducir en mejores condiciones viales en la ciudad. El tráfico de la capital sigue siendo uno de los más pesados en el mundo y recientemente el número de ciclistas y peatones atropellados ha aumentado en los últimos años.
La principal causa de multa en la ciudad es el exceso de velocidad. En 2010 se castigó a 840 mil conductores por manejar con exceso de velocidad. Esta cifra si bien sigue siendo alta, se ha logrado disminuir al paso de los años. En 2011 el número de multas por exceso de velocidad era de 610 mil, esta bajó a 554 mil en 2013. El dinero recaudado sólo por multas por manejar con exceso de velocidad fue de 140 millones de pesos en 2014.La segunda infracción más sancionada por las autoridades es el estacionarse en lugares indebidos y después el no usar el cinturón de seguridad.
Desafortunadamente, las altas sumas de dinero no implican necesariamente una buena aplicación del reglamento vial. Los agentes de tránsito del Distrito Federal es uno de los grupos policiacos más corruptos dentro de la policia de la capital. Con base en un estudio realizado por Parametria, 90% de los capitalinos dice que la corrupción entre agentes de tránsito, peatones y conductores se experimenta cotidianamente. Solamente el 7% de los encuestados dijeron nunca haber visto algún acto de corrupción en donde se involucrara un agente de tránsito. El 58% de los conductores en la Ciudad de México admitió alguna vez haber participado en algún acto de corrupción con la autoridad para evitar ser sancionado.
El nuevo reglamento vial busca mejorar la calidad vial de la ciudad. Sin embargo, a lo largo de los años sólo hemos visto más ingresos provenientes de multas sin un mejoramiento en las calles de la capital. Además, basándonos en los altos niveles de corrupción de los agentes viales y los conductores, la nueva reglamentación más que servir al mejoramiento de las vialidades y los conductores, sólo creará más incentivos para la corrupción.