Omar García Harfuch – Secretaría de Seguridad
Es conocido como el “súper policía”, apodo que se ganó por realizar operaciones de campo. Es político y funcionario, miembro de Morena desde 2019. Estudió derecho en la Universidad Continental y es licenciado en Seguridad Pública y maestro en Administración Pública por la Universidad del Valle de México. Además, tiene estudios de especialización en seguridad en la Universidad de Harvard y en el Buró Federal de Investigaciones y la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos.
Es hijo de Javier García Paniagua, un político que fue titular de la Dirección Federal de Seguridad durante el periodo de la Guerra Sucia y que fue acusado de torturar a estudiantes y opositores del gobierno. Sin embargo, el expediente que supuestamente confirma estas acusaciones está perdido. También, su abuelo, Marcelino García, fue secretario de Defensa Nacional de Gustavo Díaz Ordaz, cargo que ocupó durante la masacre del 2 de octubre de 1968. Es por ello, que fue una elección extraña cuando Claudia Sheinbaum, quien proviene de los movimientos estudiantiles, lo designó secretario de Seguridad de la Ciudad de México.
Omar García Harfuch comenzó su carrera en 2008 al unirse a la entonces Policía Federal Preventiva durante el sexenio de Felipe Calderón. Fue un personaje cercano a Genaro García Luna, el secretario de Seguridad de Felipe Calderón, quien acaba de ser sentenciado en Estados Unidos por narcotráfico.
Fue ascendiendo hasta encabezar la Policía Federal de Guerrero, justo cuando desaparecieron los 43 normalistas de Ayotzinapa en 2014. También fue acusado de estar presente en la reunión en la que Tomás Zerón y Jesús Murillo Karam presuntamente construyeron “la verdad histórica”, aunque él lo ha negado.
Un testigo protegido del grupo criminal Guerreros Unidos, que participó en la desaparición de los 43 normalistas, declaró que Omar García Harfuch recibía 200 mil pesos por hacer la vista gorda, acusación que también ha negado.
En 2016, fue ascendido a comisionado de la Agencia de Investigación Criminal de la Fiscalía General de la República, cargo que desempeñó hasta 2018. Se enfocó en capturar a grandes líderes del crimen organizado, como Damaso López, alias “El Licenciado”, uno de los principales mandos del Cártel de Sinaloa, y a David “N”, alias “El Pistaches”, líder de Unión de Tepito. También participó en la detención del exgobernador de Veracruz, Javier Duarte, acusado de enriquecimiento ilícito, peculado, incumplimiento del deber legal, lavado de dinero y delincuencia organizada.
En 2019, coordinó las fuerzas de la Fiscalía General de la República para desmantelar las organizaciones criminales que operaban en la Ciudad de México, como Unión Tepito y Fuerza Anti Unión, y en un operativo logró detener a los líderes de estos grupos: “el Tortas” y “el Jamón”.
Ese mismo año, Claudia Sheinbaum, como jefa de Gobierno de la Ciudad de México, lo nombró secretario de Seguridad tras la renuncia de Jesús Orta Martínez. Durante su gestión, más de medio centenar de agentes relacionados con posibles actos de corrupción fueron dados de baja, según Animal Político, y los delitos de homicidio disminuyeron a menos de la mitad, de acuerdo con la propia Claudia Sheinbaum.
El 26 de junio de 2020, fue atacado por miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación en pleno Paseo de la Reforma. Le dispararon 414 veces. Sobrevivió al ataque; sin embargo, una mujer que estaba cerca y dos de sus escoltas murieron. Cuatro de los atacantes fueron detenidos.
Se postuló en la elección interna de Morena para ser candidato a jefe de Gobierno de la Ciudad de México, aunque finalmente el partido favoreció a Clara Brugada.
Omar García Harfuch asume el cargo de secretario de Seguridad sin un cuerpo de seguridad. Ahora que la Guardia Nacional—que reemplazó a la Policía Federal—es parte de la Secretaría de Defensa Nacional (SEDENA), tendrá un rol de coordinador entre las fuerzas civiles y militares del país, tal como lo hizo su antecesora, Rosa Icela Rodríguez.
También podría fortalecer o crear equipos dentro de los agentes que aún están adscritos a la Secretaría de Seguridad, según El País. García Harfuch se ha ganado el respeto de los policías y el Ejército por “poner el cuerpo”, liderar operativos y saber lo que es esperar afuera de un OXXO durante horas, según un colaborador entrevistado por El País.
El 8 de octubre, en la conferencia mañanera de Claudia Sheinbaum, presentó su estrategia de seguridad, que consiste en atender las causas mediante la reducción de la pobreza, el fortalecimiento de las labores de inteligencia mediante la creación de la Subsecretaría de Inteligencia e Investigación Policial, la consolidación de la Guardia Nacional—que ya cuenta con 133 mil elementos—y la mejora en la coordinación entre todas las fuerzas del país.